Logró la mayoría sumando a aliados del Movimiento Popular Neuquino y a legisladores de Tierra del Fuego que se alejaron del ARI. La norma prevé un crecimiento del PBI de 2,5%, una inflación de 6,1% y un dólar promedio a $ 3,95.
El Senado aprobó durante la madrugada y convirtió en ley el proyecto oficial de Presupuesto nacional para 2010 y la prórroga de cinco impuestos considerados esenciales por el Gobierno: la de 10 años del tributo sobre los Bienes Personales, las Ganancias y la Ganancia Mínima Presunta; la de dos años para la Ley del Cheque y la de un año para el que se aplica al precio final de los cigarrillos.
El oficialismo obtuvo el apoyo de 42 legisladores, cuatro por en encima de la mayoría, mientras la oposición consiguió 25 votos en la aprobación del Presupuesto nacional, y resolvió con 41 sufragios contra 26 la discusión en general y en particular de la prórroga de los gravámenes nacionales. Logró esa mayoría gracias al apoyo de aliados como el Movimiento Popular Neuquino y legisladores de Tierra del Fuego que se alejaron el ARI.
El Presupuesto prevé gastos por $ 273.129,4 millones, de los cuales 60% serán destinados a políticas sociales. Supone un tipo de cambio promedio de $3,95 por dólar y una inflación de 6,1% anual. También proyecta un crecimiento del PBI de 2,5%, un aumento del consumo de 2,7% y una ampliación de la inversión cercana a 8,2%.
La iniciativa calcula que las exportaciones del año próximo sumarán U$S 65.173 millones, con un crecimiento real de 8,4%, mientras las importaciones ascenderán a U$S 50.995 millones, 7,4% por encima de las de 2009, lo que dejará un superávit comercial en torno de U$S 14.000 millones.
Opiniones
El debate, que se había iniciado a las 16, se extendió por 10 horas hasta las 2 de la madrugada en un trámite lento y discutido en el que expusieron 27 oradores.
El jefe del oficialismo, Miguel Pichetto, lamentó que la oposición y los medios de comunicación “no reconozcan todas las cosas positivas que hizo este gobierno” y dijo que a algunos comunicadores “les encantaría que todo esto terminara mal” y dijo advertir “un odio visceral equivalente al 55 y uno de los peores momentos que vivió el país”.
El titular del bloque radical Ernesto Sanz dijo que el Presupuesto “profundiza la concentración de recursos en la Nación, que se queda cada vez con una proporción mayor de la recaudación, que en el 2010 será de 77%, mientras las provincias reciben cada vez menos”. Opinó que la iniciativa oficial es “el Presupuesto de la asfixia financiera para las provincias y de su sometimiento definitivo a la billetera discrecional del gobierno nacional: la profundización del modelo unitario de país”.
El justicialista puntano Adolfo Rodríguez Saá dijo que el presupuesto expresa “el modelo chavista, el de las 37 facultades delegadas, de la consolidación del capitalismo de amigo, de la mala distribución de la riqueza y de la peor desigualdad social”. Agregó que “este modelo genera una enorme irritación social, piqueteros en la calle, cortes de rutas y falta de calidad institucional”.
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