El socio de Alan Faena compró Warner Music

El multimillonario ruso Leonard Blavatnik pagó U$S 3.300 millones para comprar la discográfica y ahora va por EMI. Junto a sus socios tiene inversiones en Puerto Madero.

Redacción Fortuna

El multimillonario ruso Leonard Blavatnik, socio en la Argentina del empresario Alan Faena en el Faena Group, acaba de convertirse en uno de los dueños del entretenimiento mundial. Adquirió a través de Acces Industries, su firma de inversiones, al gigante Warner Music (WMG), informaron a PERFIL fuentes cercanas al empresario en Argentina. La avanzada del ruso-norteamericano no quedó allí, ya que se encuentra en tratativas para sumar a su portafolio otro gigante de la música, EMI.

Blavatnik se erigió como ganador de la subasta de WMG que duró unos tres meses, lo que le habría costado unos US$ 3.300 millones. En el camino quedaron otros pretendientes: Sony junto con ATV Music Publishing y los hermanos Alex y Tom Gores.

Warner salió a la venta a principios de año, en momentos en que la industria musical no pasa por circunstancias positivas, con caídas de ventas de discos y cambios en el negocio por el avance en la industria de Internet.

La adquisición pone al socio de Faena -accionista principal en su empresa- en la carrera para hacerse con EMI, que en la actualidad pertenece a Citigroup. Un competidor de ese grupo financiero, Goldman Sachs, organizó la subasta.

“Creemos que esta transacción es muy positiva para los intereses de los accionistas, para los fans de la música, nuestros artistas y los autores de las canciones”, señaló Edgar Bronfman, CEO de la compañía.

Los sellos más importante de Warner son Warner Bros. Records y Atlantic. En el listado de sus bandas figuran Red Hot Chili Peppers, White Stripes y Kid Rock entre muchos otros.

Leonid Valentinovich Blavatnik nació en Moscú en 1957 y llegó a EE.UU. en 1978, casi sin dinero. En la actualidad, nacionalizado estadounidense, se estima que tiene una fortuna de US$ 7.500 millones. Según se afirma, pasa sus días entre Nueva York y Londres, desde donde también cuida sus intereses en Rusia, mayormente petroleros y de energía.

En esta Nota