Grecia grita una crisis política más grave que la económica

A dos meses de las elecciones, el primer ministro Papandreu dió marcha atrás con el referéndum e intenta acercarse al opositor que lo llamó irresponsable y le pidió la renuncia. Qué pasa si el Parlamento no apoya la ayuda financiera de la UE.

Redacción Fortuna

Por estas horas, la crisis política en Grecia es mayor que la financiera. Lo que falta de fondos, sobra de confusión, incertidumbre, pase de facturas entre el oficialismo y la oposición.

El primer ministro griego, Yorgos Papandreu, dijo estar dispuesto a abandonar sus planes para celebrar una consulta popular sobre el último programa de asistencia financiera europea, luego de que la oposición diera a su vez marcha atrás con el rechazo al paquete de ayuda y su consecuente ajuste.

Por su lado, Antonis Samarás, líder conservador de la oposición mayoritaria del partido Nueva Democracia dio un discurso frente a sus legisladores muy crítico contra la decisión y la figura de Papandreu. “El anuncio de un referéndum sobre el acuerdo de ayuda financiera europea a nuestro país es una acto de máxima irresponsabilidad que va más allá del pánico en que se encuentra el gobierno”, calificó Samarás. Además, pidió su dimisión.

Tras la nueva decisión del primer ministro, Evangelos Venizelos, su par de Finanzas, confirmó que el gobierno abandonó sus planes para someter a referendo el reciente plan de asistencia financiera europeo.

“El Gobierno anuncia de forma oficial que no avanzará hacia un referendo”, rearfirmó Venizelos, ante el grupo parlamentario socialista, según la agencia Europa Press.

Por su parte, Papandreu ignoró los pedidos de su renuncia por considerar que una elección anticipada podría provocar la salida de Grecia de la eurozona, algo que en el fondo estaba a consideración de la ciudadanía griega en el referéndum suspendido.

Por el contrario, el premier ofreció a la oposición conservadora iniciar un proceso de diálogo que permita, en caso de llegar a un consenso, aprobar en el Parlamento el plan de ayuda acordado la semana pasada por la eurozona para no tener que celebrar el arriesgado referendo sobre el impopular paquete de asistencia.

El premier desató una tormenta continental al anunciar sus planes del referendo, el lunes pasado, luego de los meses de esfuerzos que llevó acordar el último paquete de asistencia a Grecia para salir del default.

Un indicador demuestra la gravedad del asunto financiero en ese país: los bonos soberanos de corto plazo se derrumban cada día y en los mercados donde se negocian aumentaron su rendimiento más del ciento por ciento.

Pero el conflicto político recién empieza. Papandreu convocó para mañana a una votación en el Parlamento sobre la continuidad de su gobierno y su mayoría se redujo desde hoy a apenas una sola banca. El primer ministro heleno está cercado a pocos días de su salida, y en soledad avanza y retrocede sin encontrar consenso ni el rumbo adecuado.

3-11-2011