"Si el fallo es adverso para Argentina no pierde el Gobierno, perdemos todos", justificó el diputado.
La Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de los Estados Unidos aceptó el escrito presentado por Alfonso Prat Gay en favor de la Argentina, como parte del en el juicio iniciado contra el país por un grupo de bonistas que no aceptaron los canjes de la deuda argentina en 2005 y 2010.
El diputado de la Coalición Cívica había presentado un "Amicus Curiae" -término legal utilizado para definir a quienes se presentan para argumentar a favor de una parte del conflicto- ante la justicia de Nueva York el pasado 4 de enero. En dicho documento, se manifestaba en contra de la decisión emitida por el juez Thomas Griesa que ordenaba al país pagar a los holdouts en términos más beneficiosos que los acordados con los tenedores que aceptaron una quita en sus tenencias.
El escrito fue aceptado por la corte, según informó la oficina de prensa del diputado a través de un comunicado, lo cual "esto es de suma importancia porque significa que la justicia norteamericana tomará en cuenta nuevos argumentos en defensa de nuestro país a la hora de revisar su fallo".
"Estos argumentos no habían sido presentados por el Gobierno Nacional", expresó el diputado, quién agregó que "me presenté ante la corte como Amicus Curiae en defensa de los intereses de todos los argentinos". El también ex presidente del Banco Central, aclaró que "esto no es a favor o en contra del Gobierno".
"Si el fallo es adverso para Argentina no pierde el Gobierno, perdemos todos, es por ello que presenté el escrito en defensa de los intereses de mi país y me alegro de que lo tengan en cuenta, por el bien de todos los argentinos", justificó Prat Gay.
El legislador opinó que "contrariamente al relato oficial que habla de quitas récord a los bonistas, sostiene que nuestro país fue demasiado generoso con ellos. Mal podría serlo todavía más con aquellos que no aceptaron el canje, como sugiere el fallo de Griesa. La tan mentada quita del 75% a los bonistas termina siendo solo del 15% a la hora de tener en cuenta los pagos del llamado cupón de PBI".
También explicó que, contrariamente a lo sostenido por quienes hoy demandan al gobierno, Argentina "no navega en un mar de reservas" en el Banco Central, como lo demuestran, a juicio del legislador, las restricciones al mercado de cambios que lleva ya más de un año.
"Las reservas caen por la estrategia del kirchnerismo de usarlas para pagos crecientes producto de la generosidad con los bonistas y al costo interno de la mayor inflación que genera la compra de esas reservas emisión monetaria", concluyó.
