Los consejos de un premio Nobel a la hora de emprender

Daniel Shechtman, Premio Nobel de Química, participó en una conferencia en el ITBA. “Para emprender, no hay que tenerle miedo al fracaso”, dijo. Sugerencias de un líder.

Redacción Fortuna

En la conferencia “Emprendedurismo Tecnológico en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA), el Dr. Daniel Shechtman, Premio Nobel de Química, incentivó a jóvenes presentes a emprender. Durante el encuentro, Shechtman aseguró que para que un país crezca, se debe tener gran desarrollo del espíritu y conocimiento emprendedor. Para hacerlo tiene que existir una enseñanza de calidad en todos los niveles, haciendo foto en los colegios secundarios con voluntarios y luego, en las universidades, con científicos, ingenieros, biólogos, entre otros.

Shechtman está frente a su clase TECHNION del Instituto Tecnológico de Israel que recibe a todos los estudiantes “tecno” que deseen asistir. Al término de cada charla, sus alumnos deben entregar un resumen de lo que se habló para que sientan “obligación” de asistir. Pero el Premio Nobel no toma examen final porque: “yo quiero que ellos estén en la clase y lo disfruten, absorban las diferentes experiencias relajados, sin estar pensando en que luego deben rendir. Mi objetivo es motivar e incentivar el emprendedurismo.”

Al hacer referencia a la parte motivacional aseguró que “los jóvenes deben entusiasmarse por el proyecto en sí mismo y no por el dinero, porque si realmente se cree, confía y hay pasión en la idea, el dinero llegará”.

Así fue que introdujo las razones por las cuales un emprendimiento puede fracasar y entre ellas destacó:

No contar con alguien profesional, un administrador para las finanzas y cuestiones duras sobre las cuales un ingeniero, científico o tecno pueden no tener mucho conocimiento.

Falta de conocimiento del mercado.

Fuentes de colaboración monetaria erróneas: no sólo hay que lograr encontrar un inversionista que aporte dinero, sino que también quiera ayudar más allá de lo financiero, eso es clave.

Asociarse con amigos: si se asocian con amigos seguramente sean de la misma profesión. Recomendó que se asocien con profesionales de otros sectores para cubrir todas las áreas.

Ego emprendedor: creer que como se logró triunfar con el emprendimiento siempre tienen la razón. No es así. Se debe ser humilde y escuchar consejos.

Malos contratos entre los fundadores.

También aconsejó que para comenzar a desarrollar el proyecto es conveniente no invertir plata de uno, de la familia o de amigos porque puede poner en riesgo la relación, ya que es muy probable que se pierda dinero y no que se gane. No obstante, concluyó su charla convencido de que: “no hay que temerle al fracaso, esto es muy cultural. Hay que erradicarlo. Quien no fracasa difícilmente aprenda de los errores. Fracasar no es malo ni determinante, sino que es una prueba que tenemos que superar, de la cual se debe aprender, observar, para poder mejorar en los próximos intentos, porque siempre hay que volver a intentar”.

29-8-2013