El gasto en obra pública calienta motores

Las obras viales y en áreas clave como la energía se aceleran para poder llegar a tiempo a la temporada de inauguraciones.

Redacción Fortuna

Por Patricia Valli (*)

A diez meses de que se celebren las primarias abiertas que definirán candidatos para las presidenciales de octubre, las obras viales y en áreas clave como la energía se aceleran para poder llegar a tiempo a la temporada de inauguraciones. Así, las transferencias para gastos de capital –obra pública– y aportes del Estado a empresas de servicios serían del  71% según el último informe de ejecución del Presupuesto nacional.

Así lo señala el último informe de ASAP, que muestra por otra parte que las transferencias al sector energético en algunos casos llegaron a crecer hasta el 700%, como es el caso de Enarsa. Para evitar cortes de energía en el verano, Edesur –que realiza obras con carteles del Ministerio de Planificación y Presidencia de la Nación en la Ciudad– sostuvo que ya superó las “800 obras” dentro de “un plan de obras e inversiones por más de 2.700 millones de pesos”.

Si bien la Nación tiene más espalda financiera, las provincias también se ponen en marcha. Según un análisis realizado por ASAP para PERFIL, los gastos de capital de las provincias crecen a niveles cercanos a los de Nación.

En Córdoba, durante el primer semestre, se ejecutó un 78% más que en el mismo período del año anterior. De las provincias relevadas, la segunda es Santa Fe, que destinó un 68% más mientras que en Entre Ríos este segmento creció 67%, todavía por encima de la Ciudad de Buenos Aires, que hasta junio se aceleró en 52%.

En el primer cuatrimestre, la provincia de Buenos Aires había aumentado el 32% el gasto contra el mismo período del año anterior.

“La obra pública siempre es clave. En un año electoral todo gobernador quiere cortar cintas”, dijo el economista de IARAF Nadín Argañaraz sobre el aumento del gasto, que también supera a la recaudación en tierras provinciales “aunque la brecha es menos significativa” que en el caso de la Nación.

Cómo llegar a una inflación del 24%

La intervención del Indec en 2007, encabezada por Guillermo Moreno, le costó caro a la credibilidad del organismo. Más allá de la presentación del nuevo índice de precios a principios de año, el staff sigue siendo el mismo. Y la composición de la canasta o la incidencia de los Precios Cuidados en la misma, se mantiene en reserva. El resurgimiento de la brecha entre medición privada y oficial volvió a generar suspicacias. Y hasta los economistas que adhieren al proyecto ensayan estimaciones mientras que los privados prevén una suba del 40% de la inflación para el año.

Para la economista de la Gran Makro, Fernanda Vallejos, “si se anualizan los valores del primer semestre, el valor de la inflación se ubicaría en 30%”. Sin embargo, explica, la tendencia observada a la caída del índice a lo largo del año obliga a formular “una hipótesis más realista. Con un escenario donde para el tramo julio-diciembre persiste el valor de los últimos meses, de 1,4% mensual, el dato global estimado de inflación para 2014 sería de 24 por ciento”.

La otra variante es sacar de la ecuación al primer trimestre, que sufrió el impacto de la devaluación del 22% en enero y las correcciones de precios de los meses subsiguientes. “Si tomamos el período abril 2014-marzo 2015, para definir una tendencia ‘normal’, el resultado en doce meses, luego de la estabilización del segundo semestre, daría un valor anual hipotético del 19%. Con datos del instituto estadístico del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, llega a un valor en torno al 29%. Así, los incrementos en la inflación se ubican por debajo de todos los convenios colectivos de trabajo suscriptos entre abril y julio de este año.

(*) Publicado en la edición impresa del Diario PERFIL.