La agencia de recaudación bonaerense afirma que no cargarán contra los clientes sino que buscan obtener datos comerciales para cruzar.
El director ejecutivo de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA), Iván Budassi, confirmó hoy que el organismo implementará un sistema de cámaras fijas y móviles para combatir la evasión impositiva, a partir del movimiento comercial de los locales y desestimó también que se apunte a verificar a los clientes.
Budassi destacó que es la tecnología la que "nos permite ser más eficientes y optimizar recursos para fiscalizar con precisión aquellos sectores donde detectamos altos niveles de evasión".
Aseguró, además, que así, los resultados que surjan del sistema de cámaras inteligentes, se cruzarán con otras fuentes de información que tiene el organismo.
"Es un indicio más, pero un indicio muy fuerte que tendrá ARBA para establecer el monto que debieran pagar y no han pagado los incumplidores", estimó.
En declaraciones periodísticas, el funcionario aseguró que los controles en restaurantes, cocheras y boliches bailables "estarán centrados sobre los responsables tributarios de estos locales y no sobre sus clientes, cuya privacidad estará absolutamente garantizada".
Asimismo, sostuvo que los datos que obtenga la Agencia de Recaudación mediante este sistema, "tendrán únicamente fines tributarios y quedarán resguardados bajo el secreto fiscal".
Además de cámaras fijas, similares a las que se utilizan en el área de seguridad, que estarán instaladas en la zona exterior de restaurantes, cocheras y boliches bailables, ARBA hizo saber que "dispondrá de cámaras móviles que circularán en ciudades, rutas, autopistas y caminos de la provincia de Buenos Aires".
"Con la ayuda de la tecnología agilizaremos los procesos para detectar autos de alta gama con deudas de patente y vehículos de lujo que estén radicados en paraísos fiscales para evadir el pago del Impuesto Automotor en nuestra provincia", destacó Budassi.
Por último, confirmó que durante los meses de agosto y septiembre se realizó una prueba piloto en restaurantes y cocheras de distintas ciudades y aseguró que "los resultados fueron muy exitosos".
