Empresarios divididos entre Scioli y Macri

Ceferino Reato (*) | Y una consecuencia directa de esos alineamientos: dónde conviene invertir el dinero.

Redacción Fortuna

Luego de la primera vuelta, el resultado sigue abierto pero hay un nuevo favorito: Mauricio Macri, que desplazó de ese lugar a Daniel Scioli.

La posibilidad de un triunfo de la oposición (que ya gobierna varios de los principales distritos del país, incluida la poderosa provincia de Buenos Aires) ha sorprendido al oficialismo, que ahora ensaya distintas tácticas para retener el poder.

Sin embargo, más allá de quien gane el 22 de noviembre, el kirchnerismo ha pasado a mejor vida. No podía ser de otra manera con una fuerza tan personalista, tan enroscada en la presidenta Cristina Kirchner.

Pero lo que llama la atención es que el oficialismo, que dice ser progresista y de centroizquierda, ha quedado reducido a las provincias del norte y del sur mientras que ha sido derrotado sin atenuantes en el centro productivo, en la llamada Zona Núcleo o Zona Central, que constituye la columna vertebral de la economía argentina.

A esta altura parece evidente que la anomalía del kirchnerismo ha sido que durante tantos años, desde 2008, mantuvo una pelea casi sin cuartel contra el campo, que no abarca solo a los cultivos de soja y de otros granos sino también a la industria, los servicios y las exportaciones que de ellos derivan. Todos estos sectores apuestan a un cambio en el país y, en consecuencia, al triunfo de Macri.

Otro sector del empresariado, tanto en la industria como en el comercio y en los servicios, se siente más identificado con Scioli. Algunos porque respaldan las políticas kirchneristas que benefician a la industria nacional y temen perder esa protección estatal; otros porque ya conocen al peronismo y, por diversas razones, consideran que sus negocios serán más sustentables bajo un gobierno de ese signo. En definitiva, entienden que un cambio los perjudicará.

El desafío del próximo Presidente, sea Macri o sea Scioli, es integrar estas diferentes visiones; encontrar políticas que contengan al mayor número de sectores; eludir la tentación tan común en América latina de refundar el país cada diez o veinte años, como si lo que se hizo antes no sirviera para nada, que en nuestro país se traduce en bandazos hacia un mercado sin frenos y un estatismo sin cerebro.

La bandera común debería consistir en evolucionar hacia un país donde haya lugar para todos.

En este número de FORTUNA la nota de tapa guarda una relación directa con los alineamientos empresariales: dónde conviene invertir el dinero en estos tiempos de incertidumbre, teniendo a la vista que el próximo gobierno deberá hacer fuertes correcciones económicas frente al estancamiento, la escasez de dólares, la inflación y la pobreza que integran la herencia que nos deja Cristina Kirchner. La escribe un especialista, Claudio Zuchovicki, mientras el notable economista Guillermo Calvo advierte: "Va a ser muy difícil gobernar".  Lo importante es estar preparado.

(*) Editor ejecutivo de Fortuna.

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