Horacio Reyser, a la Secretaría de Relaciones Económicas Internacionales

Por Luis Carías Toscano (*) | Fue socio del mayor fondo de inversiones de latinoamérica. "Estaba en la cresta de la ola y consideraba que debía hacer algo por la función pública", dicen en su entorno.

Redacción Fortuna

Horacio Reyser Travers, el asesor directo de la Presidencia para cazar inversiones foráneas será nombrado próximamente secretario de Relaciones Económicas Internacionales, un cargo clave en la Cancillería para conseguir nuevos negocios para el país.

El último funcionario en el cargo fue Carlos Bianco durante el gobierno de Cristina Kirchner. La Secretaría se dedica a ejecutar la política exterior en materia económica del país, profundizar la integración económica con el Mercosur, incrementar las exportaciones, promover la atracción de inversión extranjera y representar al país en negociaciones y foros económicos multilaterales. Previo a su paso por el Banco Central, entre 2002 y 2004, Martín Redrado también ejerció el cargo

De la Secretaria dependen cuatro subsecretarías: Negociones Econoómicas Internacionales; Integración Económica Americana y Mercosur; Desarrollo de Inversiones y Promoción Comercial y la Dirección Nacional Centro de Economía Internacional. Todas áreas a las que la flamante canciller, Susana Malcorra, quiere imprimirles una nueva impronta. De hecho, la ministra se quedó también con la flamante Agencia de Inversiones que comanda Juan Procaccini.

Para Reyser, ex socio del mayor fondo de inversiones en Latinoamérica, Southern Cross, la tarea será alcanzar los US$ 20 mil millones en inversión extranjera prometidos por el presidente Mauricio Macri, cuyas expectativas triplican los US$ 6.612 millones que su predecesora alcanzó en 2014, según datos de la Cepal.

Durante 16 años, el ingeniero industrial del ITBA fue la mano derecha de Norberto Oscar Morita, empresario argentino que fundó el fondo de inversiones que maneja cerca de US$ 2 mil millones y aplica una filosofía de “alto involucramiento” en las compañías que controla.

Reyser empezó su carrera en la productora de acero Siderca, de Techint. Como planificador financiero participó en la adquisición de Sidor, siderúrgica venezolana que luego fue estatizada por Hugo Chávez.

Mundo CEO. En Southern Cross fue CEO interino de más de veinte empresas. Allí formó nexos con personajes que hoy son parte del Gobierno, como Mario Quintana, ex CEO de Pegasus y manager económico de Macri. Su vínculo se remonta al año 2000, cuando se redujo el directorio de General Payments SA, compuesto por Norberto Morita y Mario Quintana. Al final no quedó claro cuáles fueron los servicios prestados, pero Reyser quedó como director de la empresa.

Volverían a cruzarse en 2011 cuando Southern Cross mudó sus oficinas hacia Avenida del Libertador 602, edificio donde convivían con Pegasus y The Exxel Group. Sin embargo, el círculo de CEOs que hoy está en el Gobierno se entrelazó a través de la firma McKinsey, donde figuras como Quintana o Gustavo Lopetegui fungieron como consultores.

También trabajaron allí Juan Procaccini, flamante director de la Agencia de Inversiones Extranjeras, donde Reyser funciona como nexo con la presidencia, y Damian Scokin, que fue CEO de LAN antes de Lopetegui, y que en 2014 se unió a Ultrapetrol (Bahamas), para ocupar el puesto de Reyser.

Su escala en el mundo de los negocios llevó a Reyser a ser vicepresidente del centro de estudios Cadal, donde manifestó que “Latinoamérica atraviesa por una etapa crítica en su desarrollo. Mientras algunos países progresan, otros como Cuba, Venezuela y Argentina encuentran dificultades para el desarrollo y registran ausencias de libertad y atropellos a la propiedad privada”.

En Cadal conocería a Gabriel Salvia, uno de sus fundadores, quien expresó que Reyser estaba interesado en temas como la institucionalidad democrática, el estado de derecho y la inversión de largo plazo. “Siempre tuvo un perfil bajo. Estaba en la cresta de la ola del sector privado y consideraba que debía hacer algo por la función pública”, dijo Salvia a PERFIL.

También el default era su preocupación. “Se hizo imposible calcular una tasa de descuento. Realizamos inversiones porque vivimos en el país y entendemos las reglas de juego. Pero no es fácil para un inversor extranjero”, analizaba Reyser en 2005.

Fan de rugby, es hijo de Horacio Florencio Reyser, un almirante retirado hoy asesor del Episcopado. Su hermano, Alejandro Reyser, es socio de FSA Group, firma encargada de ejecutar inversiones en Sudamérica.

(*) De diario PERFIL. Especial para Fortuna.