El incremento se debe al impulso de la demanda de combustibles por parte de los grandes consumidores, gracias a la recuperación económica.
La producción de combustibles, en el acumulado de once meses del año 2017, alcanzó un volumen de 20.302 miles de m3 elaborados y registró un crecimiento del 1,7% con respecto a igual período del año 2016.
En dicho período también se comercializaron 22.639 miles de m3, un 3,3% superior con respecto al mismo lapso del año 2016, debido a un incremento de los volúmenes vendidos de nafta súper y de aeronaftas. Las ventas de las naftas especiales mostraron un incremento del 7,7%, y mantuvieron el crecimiento sostenido en la última década.
Las exportaciones de energía treparon a los u$s 2.127 millones en el acumulado de enero a noviembre del año pasado, cifra 19,2% superior al valor registrado en igual período de 2016. La suba está explicada por los mayores volúmenes de venta de algunos segmentos como los carburantes en un marco de recuperación de los precios de exportación de algunos productos energéticos.
En lo que respecta a las importaciones totales de energía, entre enero y noviembre de 2017, ascendieron a los u$s 5.297 millones, lo que implicó un 12,6% de suba interanual. La reducción del 2,8% de las cantidades requeridas no fue suficiente como para compensar el alza de los precios internacionales de los bienes energéticos.
Como consecuencia de la dispar evolución entre las exportaciones y las importaciones, en el período mencionado, el saldo negativo tuvo una suba del 8,5% con respecto a igual lapso del 2016, ya que totalizó u$s 3.169 millones (contra u$s 2.920 millones del acumulado de once meses del año de 2016).
Alejandro Ovando, director de IES Consultores, explica que “para los próximos meses, se espera una demanda que continúe pujante, alentada por el consumo de la industria y los grandes usuarios ante una economía en expansión, junto con una mayor demanda de combustibles”.
