Es el segundo mes consecutivo en que se reduce la brecha de precios entre origen y destino de los productos agropecuarios.
Por segundo mes consecutivo, la injerencia de los productores en el valor final de los productos volvió a subir. En septiembre, la brecha de precios entre el origen y el destino final bajó 7,1%. En estos doce meses, acumula una caída de 12,6%.
De acuerdo con el informe publicado por CAME, la brecha para los productos agrícolas cayó 7,4% a 5,52 veces, y para los ganaderos bajó 5% a 3,62 veces. De esta forma, el mes pasado, el consumidor pagó en góndola 5,14 veces más de lo que recibió el productor en la puerta de su campo. En general, la caída de la de la brecha de los últimos dos meses responde a la mejora en los desembolsos al cosechador o ganadero, y a la menor cantidad de productos con diferencias muy altas.
Los productos con mayor disparidad fueron: el limón, donde el precio se multiplicó por 9,41 veces desde que salió del campo del productor, la zanahoria con una multiplicación de 8,13 veces, la manzana roja con 7,8 veces, la lechuga con 7,7 veces, y la naranja con 7,2 veces. En cambio, el huevo, donde el consumidor pagó apenas 2,2 veces más de lo que recibió el productor, el pollo con 2,54 veces, la cebolla con 3,34 veces, la acelga con 3,75 veces, y el tomate redondo con 4,1 veces fueron los que menor desigualdad tuvieron.
Otros productos con caídas fuertes en las brechas fueron: la pera, donde la brecha bajó 30,6%, de 10,3 en agosto a 7,15 en septiembre, y el pimiento, con un descenso de 33% en la brecha (-2,7 veces).
Los datos surgen del Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que elabora el sector de Economías Regionales de CAME en base a precios diarios online de los principales supermercados del país, más de 500 precios de verdulerías y mercados para cada producto, y precios de origen de las principales zonas productoras que releva un equipo de 35 encuestadores.
