Claves de la administración de recursos para sobrevivir a los problemas económicos.
En un contexto de permanente cambio de las variables en las que se desenvuelve el negocio, el CFO desempeña un rol protagónico en la toma de decisiones y necesita un esquema de gestión que integre al resto de las áreas y permita un análisis integral para adaptarse al nuevo entorno.
Ante un escenario de incremento de costos, reducción de la rentabilidad e impacto de tasas de interés, las compañías que se encontrarán mejor posicionadas son aquellas con esquemas más flexibles, capaces de reducir la estructura de costos fijos e incrementar la productividad de los recursos claves.
Las compañías mejor posicionadas son aquellas con esquemas más flexibles.
En ese sentido, la administración del capital de trabajo, focalizada en optimizar los procesos que impactan en su dinámica, es una pieza clave que comienza con un cuestionamiento profundo de las políticas existentes (explicitas o implícitas) y concluye con la implantación de procesos integrados de gestión y control. Para ello es útil comenzar reflexionando sobre las siguientes preguntas:
¿Cuál es el nivel de los saldos ociosos, que previsibilidad tienen y que alternativas existen para su minimización y rentabilización?
La existencia de un cash-flow confiable, basado en información proyectada disponible en los sistemas de la compañía y acompañado por un análisis dinámico del mercado financiero permitirá optimizar las disponibilidades y rentabilizarlas en las mejores condiciones.
¿Cómo se balancean los períodos de financiamiento (días en la calle) y el cuidado de clientes y proveedores estratégicos?
En ese sentido, la falta de liquidez de los proveedores puede poner presión para acortar los plazos de pago y afectar la rotación de los inventarios.
¿Cómo prevenir el deterioro de la cartera de créditos, la extensión de plazos de cobro y el aumento en el grado de morosidad e incobrabilidad?
Estas circunstancias obligan a una renegociación de las condiciones de venta, segmentando a los clientes para adecuar las líneas de crédito y optimizar el proceso de cobranzas (desde el pedido hasta el cobro efectivo) para evitar que la calidad de estos activos se vea deteriorada y sean afectados por la inflación.
¿Cuál es el costo de la gestión actual de inventarios?
En la medida que solo sea una responsabilidad operativa, puede ocasionar costos ocultos que no son evaluados correctamente. Es necesario un análisis integral que comprenda, costos de inmovilización, pérdida de ventas por stock-outs, tratamiento de obsoletos, el impacto de resultados por tenencia neto de inflación y oportunidades de acuerdos con proveedores que reduzcan el costo de “sourcing”.
¿Cómo repercuten los cambios del escenario en las inversiones y su financiación?
Es fundamental adoptar un esquema integral en la optimización de las inversiones y las alternativas de financiamiento. Los cambios del marco económico y regulatorio pueden repercutir en los plazos de recupero de las inversiones, para lo cual deben revisarse las proyecciones con nuevas tasas de corte del portafolio de proyectos y rebalancear sus desembolsos y la estructura para financiarlos.
¿Están claramente definidos los responsables y los objetivos que estos tienen en relación a cada proceso que afecta al capital de trabajo?
Ejemplos como la antigüedad de deuda, los días de cobranza, los niveles y rotación de inventarios, los días de pago, los saldos inmovilizados, etc. muchas veces no tienen un esquema claro de responsabilidades y objetivos e, incluso, están asignados en forma independiente a roles con intereses contrapuestos.
¿Qué consideraciones deben tomarse en términos impositivos y financieros sobre los componentes del capital de trabajo?
Por ejemplo la venta o tercerización de la gestión de la cartera irregular.
Las reflexiones que surjan de las preguntas anteriores, proyectan el camino hacia una gestión más integrada, con un Área Financiera que participe en todos los procesos, se involucre con áreas comerciales y operativas en la negociación con clientes y proveedores; e interactué con los generadores de decisiones e información que afectan la liquidez y son la fuente para optimizar la gestión del capital de trabajo y cumplir los objetivos financieros a nivel compañía.
Las empresas que logren gestionar de manera más eficiente su función se encontrarán en una posición ventajosa para aprovechar las oportunidades que surjan del contexto actual.
(*) Jorge Gambedotti, Director de Paradigma Sociedad de Soluciones. Participa especialmente en el desarrollo de servicios para áreas de Administración y Finanzas en la Industria de Servicios Financieros.