Los interrogantes del proyecto de Zuckerberg "Internet para todos"

El dueño de Facebook planteó la meta de brindar servicio a países en vías de desarrollo. Las trabas. Galería de fotosGalería de fotos

Redacción Fortuna

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Por Andrei Sokolov (dpa)  

Cuando la red online más grande del mundo anuncia que pretende conectar a Internet a miles de millones de personas, lo primero que se te viene a la mente es que se trata de un proyecto que sirve para promocionar los intereses propios de la empresa. Facebook ya ha explotado casi totalmente el potencial de los mercados de Estados Unidos y Europa Occidental, por lo que sólo le queda crecer fuertemente en los países en vías de desarrollo, y para ello primero es necesario que la población en esos países esté conectada a la red.

"Si tenemos éxito, también se va a beneficiar Facebook", reconoce Chris Weasler, encargado de llevar a la práctica la visión del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, de una integración global en la red. El multimillonario, de 29 años, puso en marcha el año pasado el proyecto Internet.org para el acceso gratuito a importantes servicios online en países en vías de desarrollo: Wikipedia, partes meteorológicos y, cómo no, también Facebook.

Weasler, responsable de "Global Connectivity" en Internet.org, destaca la importancia de la iniciativa más allá de los propios intereses de Facebook: "Básicamente, se trata de la convicción de Mark de que cualquier persona en el mundo debe tener acceso a Internet". Ello enriquecería también a Occidente, asegura. "No hay ningún motivo para descartar que el próximo Mark Zuckerberg sea originario de un pueblo de Ghana", apostilla.

Internet.org, subraya Weasler, es uno de los proyectos centrales de Zuckerberg, y Facebook ya ha destinado a ese proyecto a cientos de empleados. Sin embargo, "a corto plazo Facebook no va a obtener beneficios y ya veremos si a largo plazo", dice Weasler. Y es que los países en cuestión no tienen mercados fuertes para la publicidad online. En otras palabras: las perspectivas que tiene Facebook con su actual modelo de negocio de convertir elevados números de usuarios en beneficios no son grandes.

El propio Zuckerberg acudió al Mobile World Congress, celebrado hace poco en Barcelona, para defender ante los capitanes del sector de la telefonía móvil las bondades de Internet.org. Anunció que este año pretende conseguir la colaboración de tres o cinco operadores de red en proyectos de prueba.

Zuckerberg no se presentó en Barcelona para mendigar, subrayó Facebook. "No creo que sea difícil encontrar tres o cinco socios entre los proveedores de telefonía móvil", dice Weasler. El plan es poner en marcha el modelo con esos socios en el transcurso de este año. "Después queremos empezar a trabajar a gran escala". Según Weasler, se trata de una tarea para los próximos diez años.

Las reacciones del sector de la telefonía móvil han sido cautelosamente positivas. "Tenemos objetivos comunes", dice Fabrice André, responsable del desarrollo en África, Medio Oriente y Asia en la compañía de telecomunicaciones Orange. Sin embargo, alguien tiene que pagar el acceso a la red", matiza.

Según trascendió, el presidente de Orange, Stephane Richard, y otros líderes del sector, entre ellos el director ejecutivo de Vodafone, Vittorio Colao, abordaron el asunto con Zuckerberg durante una cena en Barcelona. Los resultados de la conversación no se dieron a conocer.

Las propias empresas de telecomunicaciones ya están gestionando proyectos comerciales similares para abrir los mercados de los países en vías de desarrollo. Orange, por ejemplo, ofrece en el campo africano pequeñas estaciones emisoras a través de las cuales los pequeños empresarios pueden ofrecer en sus aldeas servicios telefónicos o de Internet. La inversión necesaria asciende a entre 150 y 580 euros (entre 200 y 800 dólares), dice André. Es posible conceder microcréditos.

Internet.org aún no ha resuelto todos los detalles. ¿Quién debe elegir los pocos servicios básicos a los que se puede ofrecer un acceso de bajo coste o incluso gratis? De cualquier manera, los proveedores de telefonía móvil van a tener derecho a participar en la toma de decisiones, asegura Facebook. Pero "¿qué pasaría si los operadores de red o el gobierno de un país quieren excluir justamente a Facebook? "Creo que no habría un problema para nosotros", afirma con cierto titubeo Weasler.

Facebook aún no ha revelado en absoluto las bases económicas de la oferta. ¿Quién debe pagar el acceso básico? Facebook ya ha insinuado que no asumirá todos los gastos. "Ya estamos invirtiendo mucho dinero por el hecho de que en esas regiones tenemos que ver con mercados débiles para la publicidad online", dice Weasler. Además, las compañías de telecomunicaciones conseguirían al final más clientes de Internet por el hecho de que un acceso básico despertaría el apetito por más cosas.

André, gerente de Orange, señala que se necesitará una infraestructura mucho más poderosa para cuando los usuarios en los países en vías de desarrollo empiecen a enviar a gran escala videos desde sus smartphones. Actualmente, la cifra de ventas por cliente en esos países se sitúa como promedio en entre dos y tres euros al mes.

Facebook no es el único gigante online que busca integrar en la red a los países en vías de desarrollo. Google ha desarrollado iniciativas propias como el proyecto "Loon", con emisoras instaladas en globos en la atmósfera. Sundar Pichai, máximo responsable de la plataforma Android de Google, se refiere en términos más bien diplomáticos a Internet.org. "Es una buena causa", admite. Pero entonces ¿por qué no se ha incorporado inmediatamente a este proyecto? "A mí personalmente no me lo han pedido y no conozco los detalles", dice Pichai para no hablar más del tema.

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