Brito-CFK: una relación que siempre pivoteó entre el amor y el odio

El gobierno argentino confía en él, pero el banquero fue acusado de traidor en varias oportunidades. Background.

Redacción Fortuna

El empresario y banquero Jorge Brito, dueño del Macro y presidente de la Asociación de Bancos (Adeba), mantuvo muchos encuentros y enfrentamientos con Cristina Fernández, Guillermo Moreno y hasta el propio Amado Boudou.

Vinculado, entre otros políticos, al intendente de Tigre, Sergio Massa, recientemente propuso el aporte de los bancos para “arreglar” el conflicto con los fondos buitre. Sin embargo, la historia del Gobierno nacional siempre pivoteó entre el amor-odio.

En 2003, Brito consigue reunirse con Néstor Kirchner vía Julio De Vido. Al ex presidente, Brito le da el primer crédito post default ($ 500 millones de Adeba para obras). "Si a usted le va bien, a mí me va bien", le dijo al ex presidente.

Así, con el correr de los años el Banco Macro logra convertirse en el banco de capitales nacionales más importante del país (los activos crecieron en los últimos 10 años, 863% y sus ganancias, un 650%).

Brito, a quien años después la embajada de Estados Unidos llamó "el banquero de Néstor", había logrado ingresar nuevamente al círculo del poder luego de un enfrentamiento con el ex ministro Roberto Lavagna.

Así, Brito se convirtió en el referente de Néstor Kirchner para el sector financiero. Supo hacer amistad con el ministro Julio De Vido.

El banquero también supo ganarse a Guillermo Moreno de enemigo. El ex secretario de Comercio Interior lo responsabilizó de generar una corrida cambiaria a comienzos de noviembre de 2011, cuando el Gobierno comenzaba a implementar el cepo al dólar.

Acusado por la corrida cambiaria antes de la asunción del segundo mandato de Cristina, con el fin de condicionarle la gestión, actualmente aparece como un virtual “salvador” en el conflicto con los holdouts.

Sin embargo, Brito venía criticando la estrategia de la Argentina contra los fondos buitre en la disputa judicial por los bonos en cesación de pagos al considerar que si en lugar de "pelear" se hubieran dado "explicaciones", el primer fallo del  juez neoyorquino Thomas Griesa hubiera sido distinto.

Ahora, habrá que ver cuál es el desenlace en la relación con el actual Gobierno.

30-7-2014