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Por María José Bonacifa | Buenos Aires se ha vuelto un destino con estilo y buen precio. Para los viajeros que quieren disfrutar de la cultura local, un hotel boutique mezcla tango y sofisticación.
Conseguir alojamiento en Buenos Aires se ha vuelto más sencillo desde que la crisis internacional y el alza de los precios han vuelto a la Argentina un destino menos atractivo. Pero no lo es si se busca un hotel boutique, ya que casi todos están completos si no se reserva con anticipación.
El concepto se basa en una propiedad de menor tamaño, pero con detalles exquisitos y atención personalizada. La gama va desde los llamados "bed and breakfast" (cama y desayuno) un poco sofisticados hasta aquellos que ofrecen ropa de cama y baño de finísima calidad, y detalles muy personalizados en los cuartos, basados en una investigación sobre el gusto de los huéspedes.
Carlosvia es un buen ejemplo de este tipo de ofertas. Pasar la puerta de entrada supone cambiar un bullicioso barrio del Abasto por una suerte de hogar idílico, con amplios espacios, cuidada decoración y atención cuidada sin llegar al agobio.
Ubicada detrás del ahora centro comercial Abasto y ex mercado, se erige una casona de 1920 que durante un año completo sus dueños reciclaron con infinita paciencia, recuperando cada puerta, cada marco, columnas, pisos, mármoles para lograr un mix entre modernidad y tradición.
Sus clientes se reparten entre extranjeros que vienen al país a tomar unas clases de Tango o a pasar una semana en Buenos Aires con personas del interior del país que visitan la capital con sus familias o por negocios. Clientes que, a juzgar por el libro de visitas, se convierten en amigos que reinciden una y otra vez: Holanda, Francia,
Israel, Brasil, entre otros países. Diferentes nacionalidades unidas por el dos por cuatro.
Un amplio salón con arte tanguero contemporáneo donde funcionan la recepción y el lobby es el corazón del edificio: las habitaciones se reparten en la planta baja y alta de este PH, con patios internos que invitan al relax.
Cada uno de los cuartos tiene su propio nombre y personalidad: Pampa, Cool, Delta, Marina...decoradas por su dueña con exquisito cuidado. Muebles de estilo o modernos: toda la ambientación está pensada para agradar. Un rincón para turistas que buscan confort con estilo, sin estridencias y al precio de un tres estrellas.
GUÍA DE VIAJERO
Carlosvia
Dirección: Lavalle 3100, Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Web: www.carlosvia.com
(*) Editora de Perfil.com