Aunque la salida de divisas pudo ser contenida por el Gobierno, todavía hay un goteo. Por qué el colchón es más tentador que las cuentas bancarias.
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Por Patricio Ballesteros Ledesma *
El volumen de depósitos en dólares hoy en el sistema bancario privado argentino es igual a la mitad de las divisas fugadas del país en todo el año pasado. Toda una paradoja: sólo se quedaron en el sistema financiero local la mitad de los fondos que salieron en 2011.
Cuando en octubre del año pasado el Gobierno implementó restricciones a la compra de divisas la sangría de dólares del sistema financiero ya había contabilizado más de US$ 4 mil millones. No alcanzaban los ingresos de divisas del campo ni la reservas del Banco Central para afrontar la voracidad compradora, que estaba incentivada por la creciente inflación y las tasas negativas de los plazos fijos.
Así, se pudo contener la fuga, que en el último mes de 2011 y el primero del corriente año no cesó pero se mantuvo restringida en forma significativa. En comparación con los meses pico del año pasado, en donde llegaron a salir US$ 3 mil millones en menos de 30 días, ahora es apenas un goteo.
Los depósitos en dólares se redujeron en US$ 2.434 millones en el último trimestre de 2011 y a fin de año quedaron en US$ a 12.188 millones.
En lo que va de 2012 disminuyeron sólo en US$ 139 millones y ahora suman US$ 12.050 millones, según las estadísticas del BCRA.
Esa cifra es casi exáctamente la mitad del monto acumulado por la fuga de dólares de todo el año pasado que, según evaluaron economistas y consultoras, rondó los US$ 24.000 millones.
* Editor de Fortunaweb
15-2-2012
