Por Martín Rua | Dos proyectos reclaman incluir en el Código Aeronáutico Nacional los vehículos aéreos no tripulados.
Por Martín Rua
La presencia de drones, vehículos voladores no tripulados, no para de crecer en los cielos argentinos. Ante la falta de una ley que regule su uso, en las últimas semanas surgieron dos proyectos que buscan dar un marco legal a su producción, manejo y funcionalidad. Porque el concepto de dron es muy amplio. Se puede referir a un pequeño dispositivo de uso recreativo que se consigue por $6 mil, pero también a verdaderas armas letales que llegan a los US$ 93 millones, como existen ya en EE.UU. y que están siendo ampliamente criticados por la comunidad internacional de derechos humanos.
En Argentina ya se usan metrócopteros en la Policía Metropolitana, vehículos no tripulados en la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires y también están los hexacópteros con los que cuenta el partido de Tigre, entre algunos ejemplos.
El diputado de la UCR, Agustín Portela, fue uno de los primeros en alzar la voz sobre el tema y presentó un proyecto de ley en la Cámara de Diputados para incluir a los drones dentro del Código Aeronáutico de la Nación (Ley 17.285). Su propuesta busca “terminar con el vacío legal que existe al respecto para que tengan calidad de aeronave y de esta forma haya una responsabilidad por parte del titular y de quien opere el sistema”. Portela hace hincapié en el tema de la privacidad. “Es posible que las personas puedan ser grabadas y fotografiadas de forma ilegal, tanto en espacios privados como públicos, constituyendo una seria amenaza a la privacidad personal”.
Por su parte, el legislador porteño Pablo Bergel presentó junto a los diputados Gustavo Vera, Virginia González Gass, Alejandro Bodart y Pablo Ferreyra, un proyecto para regular el uso policial de estos equipos. “Resulta preocupante que la Policía Metropolitana diga que no existe un límite a esta tecnología. Esta afirmación no sólo hace omisión del Código Aeronáutico, de la normativa específica que regula el uso de videocámaras, y del régimen de garantías de los derechos fundamentales y libertades públicas para la ciudadanía, sino que demuestra una voluntad de uso discrecional”, le dijo a PERFIL Gustavo Vera, del Bloque Verde/Alameda.
Para Vera estos dispositivos de origen militar, que lentamente se están aplicando en usos policiales y comerciales, tienen una gran versatilidad de función y adaptabilidad que incluye: filmar, fotografiar, grabar sonidos, trasladar objetos y hasta disparar. “Esto hace doblemente necesario disponer de pronta información oficial y fidedigna que despeje dudas respecto de las intenciones de uso y adaptación”, completó.
El tema de la regulación de los drones está hoy en la agenda global. Ante la falta de reglas claras para las aeronaves no tripuladas, la Administración Federal de Aviación de EE.UU. (FAA, por sus siglas en inglés) prohibió su uso comercial sin aprobación. Así, productores de cine, agricultores y todo usuario de drones deberán buscar el consentimiento de ese organismo para poder volarlos.
Publicado en la edición 906 del Diario PERFIL del 20 de julio de 2014
