¿Cómo cambió el estilo de consumo de los productos emblema de la mesa argentina? El marketing del "estilo de vida saludable" y la suba de precios cambiaron las preferencias. Informe de la consultora Abeceb.com.
Galería de fotos
Menos consumo de carne
De acuerdo a las estadísticas del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), tras cien años de ocupar el primer puesto regional Argentina perdió el liderazgo frente a Uruaguay. Actualmente los argentinos consumen 57,5 kilos anuales per cápita, mientras que el país vecino 58,2 kg.
No obstante, este dato acelera la tendencia ciclo de los últimos 30 años. En la década de 1980 el consumo era 86,5 kg/hab y en la década de 1990 esa cifra se redujo 15% hasta 68 kg/hab. Luego de 2000 ese último promedio anual por habitante bajó 4 kilos (el equivalente a un asado para 7 u 8 personas).
Vale recordar que debido a la sequía de 2009 en la faena se concentró más ganado hembra y, de igual modo, se incrementó la faena por lo que produjo una abundancia de oferta de coyuntura. Sin embargo, en 2010 el consumo de esta clase de carne bajó 16% frente al año pasado.
La cuestión de los precios tampoco fue menor: el valor de la carne se disparó 57,8% entre 2009 y lo que va de 2010.
Siguente | Pollos que vuelan »
Pollos que vuelan
La baja en la oferta de carne de vaca también se correspondió, en parte, con un incrementoen la oferta y consumo de carne de pollo.
Mientras que al comienzo de la década de 1990 un argentino consumía anualmente alrededor de 12 kg anuales de carne aviar, veinte años después este tipo de carne tiene una mayor participación en su dieta, habiendo llegado durante el año pasado a demandar 33 kg por año, esto es, un incremento del 175%.
Siguente | Menos vino, pero de calidad. Menos sifones y más gaseosa en botella »
Menos vino, pero producción de alta calidad
El consumo se vino se redujo a la mitad en los últimos 30 años, pasó de 65 litros anuales per cápita a 31 lt, según analiza la consultora Abeceb.
El cambio no es únicamente a nivel cantidad, sino que -a contrapartida- la calidad del consumo se elevó notablemente. De acuerdo a información del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en tres décadas se redujo la elección de vinos "de mesa" para ceder terreno a los vinos varietales, considerados de mejor calidad en su producción.
Hoy los varietales tienen el 29% de las ventas, mientras que al inicio de esta serie era sólo 14%.
Menos sifones y más gaseosas en botella
El consumo de gaseosa por habitante se incrementó en un 85% durante los últimos treinta años. Esta demanda de gaseosas se halla muy vinculada a la percepción que las familias tienen de la situación económica del país, siendo uno de los primeros recortes que se efectúan en el presupuesto de los hogares ante la perspectiva de ajuste económico.
Si bien el consumo de gaseosas creció mucho en los últimos treinta años, en el último tiempo este mercado se encuentra relativamente estancado. Esto es comprendido por las empresas productoras, que apelaron a una estrategia de diversificación de la oferta acorde a las nuevas tendencias de consumo.
Un claro ejemplo de esto lo constituyen las aguas envasadas, cuyo consumo demostró un gran dinamismo durante la última década, triplicando incluso el crecimiento del consumo de gaseosas, si bien su consumo en volumen es todavía mucho menor. Esta expansión en el consumo de aguas envasadas es indisociable de la tendencia reciente de explotación comercial del estilo de vida saludable, a cuyo público se dirigen principalmente las campañas de estas bebidas.
Informe: Consultora Abeceb.com
24/9/2010
