La titular de la Oficina Anticorrupción había criticado duramente las cláusulas e confidencialidad del acuerdo YPF-Chevron. Dice que "no tenía suficiente información" Galería de fotos
La titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, pidió hoy “muchas disculpas públicamente” por su radical cambio de posición sobre la confidencialidad del acuerdo YPF-Chevron. y reconoció que cuando celebró la decisión de la Corte Suprema de hacer público este contrato “no tenía suficiente información”.
“Yo sé que es antipático este cambio de opinión, pero uno lo tiene que hacer con buena fe, con información y con responsabilidad, así lo he tomado”, afirmó Alonso tras avalar la permanencia en secreto de determinadas partes del acuerdo. El viernes, Laura Alonso mantuvo una reunión de 15 minutos con Miguel Galuccio, tras lo cual dio a conocer su radical cambio de postura.
“Se caen las caretas de la hipocrecía”, había escrito hace solo unos meses, cuando se conoció el fallo del máximo tribunal que instaba al Estado a hacer público el acuerdo. “Tomemos dimensión de la importancia del fallo de la Corte sobre YPF-Chevron. Caen las caretas de la hipocresía K #El FraudeEsElRelato”, publicó el 11 de noviembre.
Tomemos dimensión de la importancia del fallo de la Corte sobre YPF-Chevron. Caen las caretas de la hipocresía K #ElFraudeEsElRelato
— Laura Alonso 🇦🇷 (@lauritalonso) November 10, 2015
Alonso justificó su cambio de posición, ahora que está a cargo de la Oficina Anticorrupción, al considerar que no es “bochornoso informarse, aceptar que hay una visión distinta y modificar una opinión”.
En este sentido, sostuvo que “sigue” creyendo que “la transparencia es la regla y que las excepciones son los secretos” y señaló que “como funcionaria pública podría haber sido irresponsable” mantener su “posición original”.
Buen día! El secreto no es la regla en democracia. El acuerdo con #Chevron empieza mal: no es público. Corre frío por la espalda, ¿no?
— Laura Alonso 🇦🇷 (@lauritalonso) July 17, 2013
“Yo le pido a todos muchas disculpas públicamente”, expresó y agregó que “el daño que le puede generar a YPF conocer la totalidad del contrato sin respetar la confidencialidad que afectaría el interés de la compañía, que es de interés público, porque el 51 por ciento de las acciones son de los argentinos, sería irreparable”.
Alonso reconoció que recién tuvo toda la información el jueves, el fin de semana se dedicó a leerla y terminó de cambiar de postura tras la reunión que mantuvo con el jefe de la petrolera, Miguel Galuccio.
La dirigente del PRO dijo que en noviembre opinó “de oficio" porque le “preocupaba la situación general al respecto de esto”, pero “pudo averiguar todo ahora”, tras su reunión con Galuccio, por lo que "solo resta mirar hacia adelante”.
“Yo no tuve mala información, no tuve suficiente información. Los que tienen mala información y desinforman son aquellos que sí obtuvieron información y sostienen una posición como si no hubieran obtenido esa información. Cuando uno no tiene información está bien que se generen sospechas. Pero después me informé y cambié de posición”, concluyó.