El humor y las actitudes del hombre más rico del mundo resultan muy molestas dentro del gabinete de Trump y el fastidio es cada vez más difícil de disimular.
Cada vez es más difícil para los funcionarios de la Casa Blanca ocultar su fastidio ante el comportamiento "irritante" de Elon Musk. En ese sentido, The Daily Beast, un portal especializado en política y entretenimiento, asegura que altos funcionarios del gabinete de Trump están "profundamente molestos" por el sentido del humor del director de DOGE.
"Estuve en la misma habitación con Elon, y siempre intenta ser gracioso. Y no lo es. Para nada", declaró un alto cargo de la administración del líder republicano a la revista Rolling Stone. "Hace chistes, pequeñas acotaciones, sonríe y luego parece casi dolido si no le haces caso. Sigo usando la palabra "molesto"; mucha gente que tiene que lidiar con él lo hace", aseveró.
Tal es el enojo con el empresario que, incluso la palabra "molesto" no le hace justicia, según cuentan los funcionarios. "Elon simplemente se cree más inteligente que todos los demás y actúa como tal, incluso cuando es evidente que no sabe de qué habla", sentenciaron.
El comportamiento insufrible de Musk empieza a ser un riesgo para la toma de decisiones. De acuerdo con la información publicada, varias personas dentro del gabinete decidieron abandonar reuniones importantes ante la carga que representa Musk y se cuestionaron sinceramente si no estaba drogado.
Elon Musk llamó al asesor económico favorito de Trump un "verdadero idiota"
Mientras tanto, se dice que el secretario de Estado, Marco Rubio, apenas puede ocultar su profunda antipatía por el jefe de DOGE, y los funcionarios del Departamento de Estado lo llaman habitualmente "El Tío Loco Elon" a sus espaldas. "Hablar con él a veces es como escuchar clavos oxidados en una pizarra", afirmó la fuente de la Casa Blanca. "Es la persona más irritante con la que he tenido que lidiar, y eso es decir algo".
Otros funcionarios sugirieron que el hombre más rico del mundo se someta a una prueba de drogas obligatoria, lo cual, según él, es una "gran idea" para los empleados federales, como una forma de expulsarlo. El director ejecutivo de Tesla niega haber consumido drogas ilegales, aunque numerosas personas afirman haberlo visto consumir LSD, cocaína, éxtasis y hongos a puerta cerrada, según informa el Wall Street Journal.
La presencia de Musk dentro de la Casa Blanca se volvió aun más irritable después de que pidiera instalar terminales de internet de su compañía Starlink en todo el campus. La decisión de incorporar, a su "ejército nerd" de empleados de DOGE, muchos de ellos veinteañeros en las agencias gubernamentales tampoco ayuda. Incluso, señalaron que amenazan rutinariamente con "llamar a Elon" si no se cumplen sus exigencias.
La oficina especial de Musk
Musk cuenta con una oficina para sí mismo en el Edificio Ejecutivo Eisenhower en el complejo de la Casa Blanca, frente al Ala Oeste y al lado de la oficina del vicepresidente.
Según The Times, el jefe de DOGE instaló un televisor "enorme" y una PC para videojuegos en la habitación que usa para jugar, y se dice que se "encierra" en el edificio gubernamental durante días, a veces durmiendo en el sofá o en su escritorio.
Su hijo pequeño, X Æ A-Xii, de cuatro años, también está "bastante presente", aunque no está claro si duerme en la oficina cuando "no molesta" al presidente durante las conferencias de prensa en el Despacho Oval.
RM
