El candidato opositor

La polémica entre empresarios y los directores estatales de la ANSES.

Redacción Fortuna

Por Virginia Porcella *

Para satisfacción de los ideólogos de la medida, no hay ámbito dentro del mundo de los negocios donde no se hable con espanto de la decisión del Gobierno de ampliar su participación en los directorios de las empresas invocando el derecho de las acciones heredadas de las AFJP.

Sin embargo, a conmoción general en el estado anímico de los empresarios, caben reacciones particulares y únicas en las mesas de decisión de cada compañía. En muchas de ellas, incluso, no habrá cambios hasta dentro de un año, cuando se vuelvan a reunir las asambleas de accionistas y tengan así la chance de votar a los nuevos directores.

En la práctica, los alcances y efectos de la medida no lucen ni tan amplios ni inmediatos como su repercusión puede hacer suponer. Pero en la teoría, y sobre todo en el discurso, las cosas son distintas. Lo saben los empresarios, que vieron cómo el mercado digirió sin mayor dramatismo la noticia (las cotizaciones acusaron el impacto recien a las 48 hs, afectadas tambien por un pésimo clima internacional) y que se sienten advertidos por un gobierno que acaba de hacer una tremenda demostración de poder a pocos meses de ir a elecciones -que a esta altura nadie imagina vaya a perder sin que Cristina siquiera se haya postulado.

Es que, aunque no se note, hay una campaña en marcha. A falta de un buen candidato opositor, qué mejor para la lógica kirchnerista que tener un buen enemigo a mano, por si las cosas se complican. Si es grande y poderoso, sirve. Si además encarna “voraces y desmedidas ambiciones capitalistas” ya es perfecto. El lote de 42 empresas donde la ANSES tiene participación accionaria y en el que se destaca Techint cumple con rigurosidad todos los requisitos.

* Editora de la Revista Fortuna

Twitter @vporce

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