La caída de Flappy Bird, el videojuego más odiado

Lo jugaron más de 50 millones de personas, que se frustraron por el nivel de dificultad. Ahora su creador lo eliminó.

Redacción Fortuna

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Por Facundo Falduto, @elfaco (*)

La premisa es simple: sos un pajarito, el Flappy Bird, y tenés que flotar por entre medio de unos tubos. Cada vez que apretás la pantalla, el pajarito aletea hacia arriba. Que sea simple no quiere decir que sea fácil: se trata, al contrario, de uno de los videojuegos más difíciles, que además generó un amplio revuelo en la web.

Es que el Flappy Bird se convirtió en un éxito de la noche a la mañana: llegó a tener más de 50 millones de descargas. Era gratis y no tenía ningún "contenido premium", como suelen tener varios videojuegos diseñados para móviles. Pero, gracias a la publicidad, le dejaba a su creador unos 50.000 dólares diarios.

¿Qué tenía el Flappy Bird para ser tan atractivo? Su simpleza -un sólo botón, un único movimiento- y su nivel de dificultad -al principio es difícil hacer más de uno o dos puntos- lo hacían adictivo. Una especie de frustración positiva -"¡Este juego no me va a ganar!"- y la competencia entre amigos lo volvieron popular. El boca a boca hizo el resto.

Pero lo mismo que convirtió al juego en un éxito terminó siendo su condena. Miles de usuarios -algo exagerados- se volcaron a las redes sociales para expresar su frustración por el nivel de dificultad. Mensajes como "este juego arruinó mi vida" y sus variantes se volvieron comunes en Twitter, Facebook, Instagram y Tumblr.

El creador, el programador vietnamita Dong Nguyen, llegó a recibir amenazas de muerte. Por eso, tomó la decisión de dar de baja el juego: "Disculpen, usuarios de Flappy Bird. Mañana voy a sacar el juego. No puedo soportar más esto", escribió el sábado en Twitter. Luego aclaró que el juego no estaba a la venta y que seguiría creando videojuegos. La noticia provocó reacciones aún peores entre los fanáticos: algunos usuarios le dijeron que se suicidarían si lo eliminaba.

Pero Nguyen cumplió con su promesa: Flappy Bird ya no está disponible en la tienda de aplicaciones de Android, Google Play, ni en la de iPhone. Quienes lo hayan descargado antes del 9 de febrero pueden seguir jugando en sus teléfonos e incluso volver a bajarlo desde la tienda, pero no puede agregarse a nuevos aparatos.

La caída del Flappy Bird provocó otras dos consecuencias inesperadas: surgieron decenas de clones (Happy Bird, City Bird, Flappy Bird HD, etcétera, etcétera, etcétera) que aspiran a imitar el éxito del original. Además, se creó una especie de "mercado negro" del juego: en Estados Unidos, un usuario armó una subasta por un iPhone 5S con el juego instalado. Llegó a conseguir una oferta de 99.000 dólares, justo antes de que Ebay lo eliminara.

En la versión argentina de Mercadolibre ofrecen "alquiler de celulares con Flappy Bird instalado" con "precio a convenir", aunque es probable que se trate de una broma. Por último, comenzó a circular el rumor de que Nguyen se suicidó tras dar de baja el juego, pero se trata de una versión falsa. Demasiado revuelo para el pajarito en muy poco tiempo. Revuelo que seguramente se calme con el correr de los días.

(*) Periodista de Perfil.com, ganó 73 puntos en el Flappy Bird.