Cuáles son las chances reales que tiene Argentina de pasar a integrar el bloque económico transcontinental.
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Por Federico Rouco
Desde la caída del muro de Berlín y la Unión Soviética, se vio un cambio rotundo de la geopolítica, lo que se creía como una victoria del capitalismo occidental y tradicional por sobre ideologías que, en su mayoría, solían provenir de oriente. Argentina estuvo siempre bastante ajena a toda esta discusión, hasta hace unos pocos años.
Raúl Prebisch, uno de los economistas argentinos más conocidos mundialmente, hablaba del centro y la periferia. Un centro conformado por los países que eran potencia económica, quienes tenían preponderancia por sobre la periferia, los países sub-desarrollados, ahora conocidos como “Emergentes”, que es mas políticamente correcto.
Al comienzo del periodo post-caída del muro y URSS, el capitalismo occidental parecía llevar la delantera pero, de a poco, comenzaron a surgir algunos gigantes que estarían queriendo pelear los rankings económicos. Uno de estos bloques que viene ganando terreno en este último tiempo es el llamado BRICS, conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. Otro bloque, aunque de menor relevancia es el MINT (México, Indonesia, Nigeria y Turquía). En terminología de Prebisch, serían algo parecido al centro de la periferia. Este bloque fue llamado de esta forma por Jim O´Neill, quien era economista jefe de Goldman Sachs, en un juego de palabras hacía pensar que este bloque iba a ser el ladrillo (Ladrillo se dice brick, en inglés) clave para el crecimiento mundial. Sin embargo, estos países están lejos de alcanzar a varios de las potencias de occidente, por lo menos en término per capita. Rusia es el que presenta un mayor nivel de PBI per capita, con casi U$S 18.000, seguido por Brasil y Sudáfrica que rondan los U$S11.000 y, por ultimo, China e India con U$S9.000 y U$S3.800, respectivamente. Estados Unidos tiene un PBI per capita mayor a U$S 45.000, casi 3 veces más alto que el mayor de los BRICS.
A simple vista, estos países no parecerían ser de gran importancia, si nos basamos solo en este tipo de indicadores. La importancia, sin embargo, es notable cuando nos fijamos en los valores totales de estos países, y ya no per capita. Entre estos 5 países, representan más del 40% de la población, más del 20% del PIB y 20% de la inversión mundial.
Son países que, por su rol de “periféricos”, no sintieron tan de lleno el embate de la crisis financiera de 2007/2008, que tuvo lugar en Estados Unidos y Europa occidental. Estos países siguieron creciendo a tasas altas. A tal punto están ajenos a los problemas e idiosincrasias de oriente, que están pensando, hace ya un tiempo, la creación de un Banco BRICS, como una entidad paralela al Banco Mundial y FMI. Los últimos años, sin embargo, han mostrado un desaceleramiento de las tasas de crecimiento de estos países, aunque nada parecido a lo que pasó en Europa.
En este último tiempo, funcionarios muy importantes de los países miembros han empezado a hacer explícito su deseo de incorporar a Argentina (Aunque Putin haya descartado esta idea), en una suerte de BRICSA que, con 6 países, ya le empezaría a pelear en número al G-7. Ahora bien, ¿es importante esto para Argentina? ¿Son estos países parecidos a Argentina? La idea de armar un bloque es que sea lo mas homogéneo posible, por lo menos en ideologías e idiosincrasias.
Según el Índice de Libertad Económica que elabora la Heritage Foundation, salvo Sudáfrica, que esta muy influenciado por la cultura británica, los otros 4 países están entre los países con menos libertad económica. De 178 países que son incluidos en el índice, Sudáfrica ocupa el puesto 75, Brasil el puesto 114, India el puesto 120 y China el puesto 137. El último de esta lista es Rusia, que ocupa el puesto 140 de 178 países. Es decir, el nivel de libertad económica es muy bajo en este bloque. El índice en cuestión considera desde la libertad para invertir hasta la percepción de corrupción o la transparencia fiscal. Argentina, por su parte, ocupa el puesto 166, lo que implica estar entre el 10% de los países con menor libertad económica. A su vez, Argentina es el país que presenta el mayor nivel de gasto público como porcentaje del PIB, con más de 40%. Este mismo indicador para el resto de los países BRICS, va entre 25% y 38%.
Es decir, por el lado institucional, no son países que estén mejor rankeados. Según la corriente que toma a las instituciones como base del crecimiento económico, que ahora se volvió una moda por el libro de Acemoglu. “¿Por qué fracasan los países?”, una de las instituciones mas importantes es el respeto a la propiedad privada. Si esto no es respetado, el marco institucional se vera herido, lo que será perjudicial para futuras inversiones o nuevos negocios.
En cuanto al desarrollo que presentan estos países, y basándonos en el Índice de Desarrollo Humano (IDH) elaborado por la ONU, el país con mayor IDH sería Rusia, aunque esta rankeado 55 dentro de casi 200 países. De entrar Argentina al bloque BRICS, sería el país con mayor IDH, con un IDH que lo ubica en el puesto 45, dos puestos arriba del límite entre países con alto desarrollo y países con muy alto desarrollo. Esta diferencia tan grande entre Argentina y el resto viene dada, sobretodo, por el alto ingreso per cápita y por la esperanza de vida al nacer, donde Argentina tiene el nivel más alto de este grupo. Desde el 80 hasta hoy, estos 6 países vieron aumentar su desarrollo, aunque parecería estar estancándose en los últimos años. Podría pensarse que, tras un periodo de alto aumento del desarrollo, se llegó a un nivel en el cual ya no hay mucho más por mejor, a menos que haya un cambio estructural. Este cambio debería ser institucional y, de esa forma, se podría dar un salto de calidad que los acerque a los países que están en la cima.
En cuanto a la educación, Argentina y Rusia son los países que presentan los mejores valores en cuanto a analfabetismo y años de escolaridad. Sin embargo, Argentina no tiene una buena calidad educativa, siendo el país que obtuvo los peores resultados en las Pruebas Pisa, cerca de Brasil, pero muy lejos de Rusia y China. Sudáfrica e India no presentan datos. Esto es clave a futuro, ya que la educación es vital en el desarrollo y posterior crecimiento económico de una sociedad.
Estos países, como se dijo al principio, son muy relevantes para la estrategia a largo plazo de un pais cuando son tomados como un todo y no en valores per capita. Cuando se toma el nivel de desarrollo o la calidad de vida, los valores que se ven son muy bajos. La pobreza, mas alla de que sea cada vez menor, es uno de los problemas mas agobiantes que presentan China, India y Brasil, por ejemplo. La falta de un democracia total en China y Rusia, es algo preocupante.
En terminos de comercio exterior, son jugadores claves para Argentina, tanto que estos 5 países nuclean el 30% de las exportaciones y proveen el 43% de las importaciones del país (INDEC, datos a 2012). Argentina presenta un deficit de cuenta corriente de mas de cinco mil millones de dolares con los paises de este bloque.
Para Argentina sería vital formar parte de este grupo, siempre tienendo en claro que se puede formar parte en el aspecto comercial, aunque no se comparta la idiosincrasia, la cual no debería ser adoptada por el futuro gobierno. Este tipo de idiosincrasia podría generarles a estos países un bajo crecimiento futuro, a menos que se dé más lugar a la libertad económica de los individuos.
Ser aceptado en este bloque implicaría un mayor crecimiento económico, acompañado de financiamiento de países que vienen creciendo bastante y están deseosos de invertir. Justo lo que Argentina necesita.
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Federico Rouco es estudiante de Economía de la UCA y de la University of Leeds, Reino Unido. Es investigador adscripto en el Centro de Investigación Aplicada de la Escuela de Negocios de la UCA e Integra el Grupo Joven de la Fundación Libertad y Progreso.
