La nueva estrategia del grupo español es analizar la situación de sus filiales país por país en Hispanoamérica. Brasil, como un mercado prioritario.
El presidente y director ejecutivo global de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, señaló en una carta dirigida a los "grupos de interés" de la empresa que habrá un cambio radical en su estrategia de negocios en el mundo, en la que se priorizarán los mercados de Brasil, España, Alemania y Reino Unido, mientras que en el resto de Hispanoamérica se va a "adoptar un nuevo modelo para estas operaciones, que pasan a gestionarse como una unidad autónoma con un equipo dedicado".
Según Álvarez-Pallete, "nuestras operaciones en Hispanoamérica eran hasta hace unos años el motor de crecimiento de la compañía. Sin embargo, las condiciones particulares en estos mercados han impactado en la evolución de nuestros negocios, mermando su contribución en los últimos años por distintos motivos (entorno macro y regulatorio, mayor presión competitiva, una escala insuficiente o la volatilidad de las divisas), a pesar de los enormes esfuerzos de los equipos locales, que siempre han mostrado un fuerte compromiso".
Desde Telefónica de Argentina señalaron que la idea es que en la región (excepto Brasil) se van a unificar las dos zonas, Norte y Sur, en que estaban divididas las operaciones.
También, el presidente global señaló que "ponemos en marcha la revisión de nuestro portafolio de activos en Hispanoamérica con el doble objetivo de modular nuestra exposición a la región, al tiempo que se crean las condiciones para maximizar su valor, tanto vía crecimiento, como consolidación y posibles operaciones corporativas".
Esto significa que, según la situación particular de cada país en los que está la empresa, se va a analizar la mejor estrategia: ya sea, por alianzas con otras empresas, compartir infraestructura, y otras opciones, entre las que no está descartada la venta, aunque, en la subsidiaria local destacaron que esta decisión de la casa matriz no implica directamente una venta, sino la búsqueda de la alternativa más viable para hacer rentable el negocio.
Según la agencia Bloomberg, los cuatro mercados que prioriza Telefónica representan el 80% de sus ventas. También se analiza una reorganización administrativa en España.
Estos cambios generarán más de 2.000 millones de euros (u$s 2.200 millones) de ingresos adicionales y un aumento de dos puntos porcentuales en el margen de flujo de efectivo operativo para 2022, señaló la firma.
En su carta, Álvarez-Pallete destaca que "las inversiones realizadas y el conjunto de nuestra actividad redundan en la generación de 1,2 millones de puestos de trabajo directos e indirectos, una aportación fiscal de 10.000 millones de euros al año y un impacto en el PIB de más de 53.000 millones de euros en los países donde operamos. Cumplimos y cumpliremos nuestra misión: hacer nuestro mundo más humano, conectando la vida de las personas. Y, además, de forma sostenible".
También anunció el lanzamiento de Telefónica Tech, que "aglutinará la propuesta de valor más avanzada para el segmento B2B, enfocándose en tres negocios: ciberseguridad, IoT y Big Data, y cloud".
Finalmente, y la otra pata de los cambios en Telefónica, es la creación de Telefónica Infra, que "englobará nuestras participaciones accionariales en vehículos de infraestructuras de telecomunicaciones que permitan reforzar nuestras plataformas tecnológicas, dando servicio tanto a las operadoras de Telefónica como a terceros".
En su carta, Álvarez-Pallete aseguró que "la Cuarta Revolución es, indiscutiblemente, una revolución tecnológica, pero también una revolución social que alterará nuestro futuro inmediato. Una revolución que va a generar billones de euros de valor y, probablemente, nos ayude a solucionar retos que hasta ahora el ser humano no había podido conquistar. No podemos imaginarnos muchas de las cosas que esta revolución nos va a traer, pero sabemos que, para que sea buena para todos, debe ser justa e inclusiva. Debe ser humana".