Se calcula que las pérdidas de las compañías aéreas podría ser de u$s 110.000 millones en este año. Que hacen para enfrentar la crisis.
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IATA, la Asociación Internacional de Transporte Áereo, estima que las aerolíneas de todo el mundo podrían llegar a perder ingresos por cerca de u$s 110.000 millones por la crisis provocada por el Coronavirus. Esto se debe a la fuerte caída en la cantidad de pasajeros, cancelación de vuelos y por el cierre de las fronteras de varios países.
Es por esto que las distintas compañías buscan el apoyo de sus gobiernos o toman medidas hacia adentro de la organización para aminorar el golpe por esta pandemia.
IATA mismo pidió a los gobiernos del Hemisferio Norte que suspendan las franjas horarios o slots (es decir, el costo que tiene el uso de la infraestructura de los aeropuertos que en las horas más rentables para las compañías salen más caros) en la temporada de verano 2020. También se pidió a los operadores de los aeropuertos que analicen bajas las tasas de aterrizaje.
El pedido más notorio a nivel privado fue el realizado por las alianzas de aerolíneas como Star Alliance, One World y Sky Team, que juntas reúnen el 50% del tráfico mundial, que solicitaron a diferentes gobiernos y a sus clientes y trabajadores que tomen y/o acepten medidas para atenuar los efectos negativos.
Por su parte, las aerolíneas norteamericanas solicitaron al gobierno de su país ayuda por u$s 50.000 millones. Las empresas y la administración Trump están analizando las posibilidades, como emitir deuda avalada por el gobierno, rebajas tributarias, tarifarias o subvenciones.
En cuanto a las medidas tomadas individualmente, Air New Zealand anunció que acordó una línea de crédito de u$s 900 millones con el gobierno de su país por el impacto del Covid-19l
El crédito será otorgado en dos tramos. Uno de 600 millones de dólares con una tasa de interés efectiva inicialmente entre 7% y 8% anual, y un segundo tramo de 300 millones de dólares con una tasa de interés efectiva del orden de 9% anualmente. El crédito estará disponible por un período de 24 meses.
Según el acuerdo, Air New Zealand podrá retirar fondos en caso de que sus reservas de efectivo caigan por debajo de un umbral mínimo.
Iberia anunció ayer que va a presentar lo que en España que llama Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por tres meses, que afectará al 90% de la planta de trabajadores, tanto personal de vuelo, de tierra y mantenimiento. La medida va a afectar a 13.900 personas de su plantilla de 17.000 empleados.
Latam anunció que reducirá el salario a la mayoría de sus empleados un 50% a partir de abril, por lo que estos trabajadores sufrirán ese ajuste en el salario que cobren en mayo. En un comunicado, la compañía indicó que redujo sus operaciones en un 70% y que "está haciendo su máximo esfuerzo por sostener los empleos de las más de 43 mil personas que componen el Grupo. A fin de lograrlo, anunció la necesidad de ajustar salarios y operar, con una mínima dotación activa, los vuelos humanitarios indispensables en este momento para el retorno de los pasajeros a sus destinos".
Ver también: Latam reducirá salarios en un 50 %
Ryanair informó ayer que dejará de volar el 25 de marzo y sólo mantendrá unos pocos vuelos entre Irlanda y Gran Bretaña. Ayer también Lufthansa (el mayor holding de Europa) informó que todavía no puede evaluar las pérdidas que tendrá este año y avisó que tiene 700 aviones parados de los 763 que posee entre sus distintas aerolíneas, como Lufthansa, Eurowings, Swiss, Austrian Airlines, Brussels Airlines y Edelweiss.
Por su parte, KLM y Air France anunciaron que reducirán sus vuelos entre el 70% y el 90%, lo que implica unos 1.000 aviones en tierra. La francesa podría despedir a 30.000 de sus 40.000 empleados.
Un estudio de CAPA (Centro para la Aviación), una consultora especializada en el rubro con sede en Australia, indica que las aerolíneas han tenido una pérdida del 50% en su valor bursátil en los distintos mercados del mundo y advirtió que las empresas se están quedando sin liquidez por la masiva cancelación de vuelos y los viajes realizados con los aviones medio vacíos.
Las que evitaron grandes pérdidas fueron las aerolíneas chinas que recibieron asistencia financiera de su gobierno.
