Consumo de tomate: por qué se da la variación de precios

Por Matías Aguirre / Cuál es la variedad más común de esta hortaliza que, por su cantidad cuando se cosecha, hace variar el precio de manera significativa.

Redacción Fortuna

Es muy habitual ver titulares en el diario o en televisión tales como: “El tomate seguirá alto hasta noviembre”; algunos más determinantes: “Tomate por las nubes en supermercados”,  así como también otros más alentadores al estilo: “El tomate seguirá a buen precio esta semana”. Pero detrás de este vaivén de precios que sufre esta hortaliza muy apreciada por los argentinos, existe una lógica que está por detrás de la formación de su precio.

Algunos datos para entender:

Pertenece a las solanáceas, familia de otras hortalizas muy conocidas

como la papa, la berenjena y los pimientos.

Es la segunda hortaliza más producida en el mundo, después de la papa, en lo que se refiere a volumen.

En nuestra región la producción es liderada por Brasil, luego Chile y por último Argentina.

Las principales zonas productivas de nuestros país son: NOA (Santiago del Estero, Jujuy y Salta), NEA

(Corrientes), Buenos aires (La Plata, Mar del Plata), Cuyo (San Juan y Mendoza)

y por último la región del Alto Valle

de Río Negro.

En primer lugar, debemos situarnos: estamos en Capital Federal o en  algún barrio del conurbano bonaerense en los meses de noviembre a marzo, es muy probable que el tomate redondo que compre para su ensalada haya sido producido en el cinturón hortícola bonaerense, una zona productiva compuesta por quince partidos de la provincia de Buenos Aires entre los cuales se encuentra La Plata y donde se ubican los productores más grandes y tecnificados.

Comenzando la temporada estos productores se encuentran con el primer cachetazo que golpea el  precio: el tomate correntino, que terminando su temporada, muchas veces coincide con el inicio del tomate redondo producido en La Plata y, como dicta la ley de la oferta y la demanda, cuando hay mucho de algo indefectiblemente tiene que valer menos. Este es uno de esos casos donde se producen las bajas abruptas de precio que adornan los titulares de las noticias. Del otro lado de la moneda,  una vez que estas cantidades abandonan el mercado el precio comienza a subir.

¿Ustedes piensan que si dejan de comprar tomate, el precio baja? No hay que olvidarse que el tomate es un producto vivo, y como tal, está atado a las condiciones del tiempo, una semana fresca en verano o un periodo de lluvias puede hacer que tarde en aparecer. Además,  entre todas las variedades de tomate que plantan en esta región, hay uno que predomina en mayor medida: el tomate redondo de la variedad Elpida. Ahora bien, ustedes se preguntarán: ¿por qué si íbamos a hablar del precio, terminamos hablando de variedades de tomate? El tomate Elpida es una variedad que cuando  logra las condiciones óptimas  posee una producción explosiva, es decir, que al mercado ingresan grandes cantidades. Si consideramos, además, que dicha variedad se planta aproximadamente en un 80%  en la zona, no tengo que decirles que es lo que pasa con el precio.

Como se puede observar,  la montaña rusa por la que transita muchas veces el precio del tomate no se debe solamente a una mera especulación, sino que hay  un argumento fisiológico-productivo por detrás. Así que antes de maldecir al verdulero de su barrio, preguntándose si conviene más comprar carne que tomate, recuerde esto y espere. ¡El tomate siempre baja!

* Ingeniero agrónomo

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