Bunge vinculó los allanamientos de la AFIP con un pedido del Gobierno

En un comunicado oficial, la multinacional Bunge aseguró que, en la reunión de la que participaron ejecutivos de otras firmas, los funcionarios advirtieron que "la falta de pago implicaría la generación de serios problemas a las compañías y a sus directivos".

Redacción Fortuna

La multinacional Bunge denunció que los allanamientos de la AFIP fueron directa consecuencia de una reunión mantenida con "altos funcionarios del Gobierno nacional" y del organismo recaudador, en la que exigieron "el pago de un anticipo extraordinario" del impuesto a las Ganancias, no amparado legalmente.

"Bunge Argentina lamenta tener que hacer notar la coincidencia de este operativo con la reunión convocada por altos funcionarios del Gobierno Nacional y realizada el día 20 de septiembre pasado en la AFIP, en la cual se exigió a las empresas del sector, entre ellas, a Bunge Argentina, el pago de un anticipo extraordinario de impuesto a las ganancias, no amparado en norma alguna", señaló la empresa.

La compañía dijo que "no podemos dejar de relacionar este grave hecho con el allanamiento realizado y las imputaciones formuladas" a los directivos de la empresa.

El comunicado de la empresa se difundió horas después de que la presidenta Cristina Kirchner -desde Alemania- asegurara que la AFIP "descubrió la mayor evasión tributaria de la Argentina", y apuntó su dardos contra la cerealera Bunge, acusada por la AFIP de evadir unos $ 1.200 millones del impuesto a las Ganancias.

La multinacional se defendió así de las acusaciones y de los allanamientos simultáneos realizados en oficinas y plantas ubicadas en la ciudad de Buenos Aires y en el interior del país, ordenados por la Justicia Federal de Río Cuarto en una causa iniciada por la AFIP.

La compañía denunció las "falaces declaraciones de funcionarios estatales y el prejuzgamiento que se pretende instalar en la sociedad", y dijo que la compañía "desarrolla su cometido en el marco de la Constitución Nacional, las leyes y las reglamentaciones administrativas, aduaneras y fiscales".

Agregó que "Bunge Argentina cumple con todas sus obligaciones impositivas, aduaneras y previsionales" y precisó que durante 2006 y 2007 pagó impuesto a las ganancias por más de $246 millones.

Indicó que "en el 2008 Bunge sufrió pérdidas y sin perjuicio de ello pagó el impuesto a la Ganancia mínima presunta por más de $33 millones ".

"En 2009 y a raíz de ilegítimos reclamos de la Aduana al sector agroexportador, Bunge debió constituir una previsión de más de $ 426 millones que le produjo una pérdida en su balance impositivo, pagando de todos modos más de $30 millones de impuesto a la ganancia mínima presunta", advirtió. Añadió que "la relación de Bunge Argentina con el Estado Nacional es franca y abierta, y siempre colabora con los controles que realizan las distintas reparticiones nacionales".

"El allanamiento del cual fue objeto la compañía y el secuestro de su documentación no aporta al Estado Nacional elemento alguno que Bunge Argentina no hubiera puesto a disposición de las autoridades fiscales con anterioridad", afirmó.

La compañía advirtió que "hará todas las presentaciones judiciales necesarias en defensa de sus derechos y de su intachable reputación comercial". "Como es inveterado en su proceder, Bunge Argentina y su directorio manifiestan que en relación a los ilícitos atribuidos, están a disposición de las autoridades judiciales competentes", afirmó.

6/10/2010