Crece la fuga de divisas a Uruguay y la AFIP investiga a contribuyentes

Los depósitos de argentinos en el país vecino subieron casi 9% en noviembre. El organismo investiga triangulaciones de comercio exterior, cuentas de sociedades y ventas de futbolistas.

Redacción Fortuna

​Pese a la presión de la AFIP por conseguir los datos de argentinos en el exterior, que tuvo su pico con la denuncia realizada sobre 4.040 cuentas no declaradas en el banco HSBC Suiza, los depósitos de ahorristas locales en Uruguay no dejan de crecer, y en noviembre registraron un salto de otro 8,7% interanual, según cifras de consultoras privadas en base a datos del Banco Central del país vecino. La “Suiza” de la clase media y media alta rioplatense, en tanto, también llama la atención de la Administración Federal de Ingresos Públicos que, según pudo comprobar PERFIL, ha pedido información de unos cincuenta contribuyentes por triangulaciones de comercio exterior, manejos irregulares de sociedades y operaciones con jugadores de fútbol.

El nivel de depósitos de los llamados “no residentes” en el Uruguay, que casi el 80% corresponde a ciudadanos argentinos según estimaciones del mercado, se estima para noviembre de este año en US$ 4.250 millones según cálculos preliminares, cuando en el mismo mes del año pasado había 3.916 millones. El incremento se da en un contexto de aumento general de depósitos en la banca uruguaya, donde los fondos pasaron a cerca de US$ 28.700 millones, desde los US$ 26.275 millones del mismo mes del año pasado.

Si bien la debacle de 2002 dejó muchas heridas y Uruguay perdió su estatus de país “grado de inversión”, el sistema financiero uruguayo fue recuperándose paulatinamente y los argentinos volvieron a confiar en esta plaza, a la par de las crecientes turbulencias cambiarias de los últimos años.

Como sea. ¿Cómo llegan los billetes a los bancos uruguayos? El ahorrista argentino pequeño y mediano que saca su plata al Uruguay lo hace generalmente en auto, ya sea por tierra o en la bodega de los barcos que surcan el Río de la Plata. En los pasos fronterizos de Fray Bentos-Puerto Unzué, Colón-Paysandú o Concordia-Salto, todos comentan que “los controles son livianos”, en tanto que hay más cuidados en la vía fluvial, donde son conocidos los perros “huele-billetes”.

La norma de la Argentina es clara. No se puede salir del país con más de US$ 10 mil por persona. Familias enteras distribuyen sumas inferiores al tope entre los distintos integrantes y así llegan del otro lado del río con ahorros en busca de resguardo.

En la mira. Con este contexto y ante la necesidad de divisas que tiene el Gobierno, en la AFIP trabajan sobre el dinero argentino que se opera en Uruguay, que tiene diversos fines. En 2012 se firmó un acuerdo de intercambio de información firmado con el gobierno de José Mujica, sobre la base de los modelos establecidos por la OCDE. A partir del artículo 13 de ese convenio, la AFIP hasta ahora ha realizado pedidos sobre unos cincuenta contribuyentes:

Cuarenta en el marco de investigaciones judiciales en torno a la compraventa de jugadores de fútbol, que en su mayoría fueron rechazadas.

Diez requisitorias administrativas de la AFIP a la DGI uruguaya que han tenido respuesta positiva y tienen que ver con triangulaciones de comercio exterior y manejos irregulares de sociedades.

Como se ve, por ahora la AFIP no tiene en la mira directamente, como en el caso suizo, fondos de argentinos que considere únicamente que no hayan sido declarados. Pero ya comenzaron, según fuentes consultadas, investigaciones sobre la llamada “zona franca” de la banca privada de Montevideo, donde podría haber novedades próximamente. Atención ahorristas: desde enero de 2017 el acuerdo bilateral gatillará, como ya está vigente con 51 países, el intercambio automático y ya no será, como hasta ahora, caso por caso.

Uruguay, saben en el órgano impositivo, ha sido plataforma para triangulaciones que terminan con fondos en paraísos fiscales. Varios bancos, luego de investigaciones de la Justicia argentina, de hecho dejaron la otra orilla y migraron directamente a Miami para operar desde ese destino que se ha vuelto tan atractivo para muchos argentinos que pasan fines de semana como si fuera la costa atlántica.

“Las estructuras financieras van mutando y hacen triangulaciones a Suiza, a Estados Unidos y últimamente también a Hong Kong”, explica un conocedor de los manejos de fondos. Ricardo Echegaray, el jefe de los sabuesos -que tiene una casa y veranea todos los años en el este uruguayo- lo sabe. Por eso desde enero próximo entrará en vigencia también un acuerdo fiscal con esa isla asiática.

La nueva regulación

Para abrir una cuenta bancaria en Uruguay se requiere justificar ingresos, presentar documentación personal y asentar algún domicilio legal en Uruguay. Además, los bancos deben informar al Banco Central del Uruguay cuando hay depósitos de más de US$ 3 mil, algo que hasta hace un tiempo no ocurría. Pero además, con la Argentina entró en vigencia hace ya casi dos años el acuerdo de intercambio de información tributaria. Esto permite a la AFIP pedir datos de contribuyentes por motivos administrativos o en causas judiciales.

Por Luis Di Lorenzo desde Montevideo, Uruguay.

Esta nota fue publicada en la Edición Impresa del Diario Perfil.