La importancia de desarrollar un producto teniendo bien en claro el segmento al que se apunta. Cómo aprender de los errores. Galería de fotos
1.¿Cuáles son las cinco claves que llevan al éxito?
En la industria vitivinícola, en la cual los ciclos de producción, venta y cobranza de los productos son largos creo que entre las cinco claves que llevan al éxito está como principal la estrategia general de la bodega dentro de la cual es vital entender a qué mercado y a qué segmento de clientes apuntamos con nuestros productos.
Luego, el equipo de trabajo es sumamente importante para concretar con éxito esa estrategia. Por otra parte, el portafolio de productos y la permanente adaptación del mismo al cambio en las preferencias de los clientes.
Por último, la elección de los importadores en los mercados externos y distribuidores en argentina, que son quienes serán los que lleven nuestros vinos a los mercados.
2. ¿Qué estrategias considera que son clave para capitalizar los errores o fracasos?
La flexibilidad y la adaptación permanente son claves para capitalizar errores y fracasos. Asimismo, creo que es necesario rodearse de equipos de trabajo donde ellos mismos comprendan que a veces los errores existen y que ellos deben ser los que los capitalicen en un aprendizaje constante.
3. ¿Cómo debe presentarse un producto ante un potencial financista para conseguir capital?
Lo que uno debe presentar es una estrategia integral del negocio, que por supuesto va a incluir el producto que se está ofreciendo al mercado.
En el caso de nuestra industria, en la cual hay una gran cantidad de productos, uno tiene que tener una segmentación muy clara de su portafolio sabiendo exactamente contra quiénes va a competir y a qué consumidores va a llegar.
El producto debe ser diseñado desde la uva, ya sabiendo a qué segmento irá destinado, evaluar los resultados de ventas y luego hacer los cambios necesarios.
4. ¿Qué condiciones debe tener un producto para poder venderse en el mercado local?
En el segmento de productos en el que nosotros competimos, en los últimos años el consumidor ha cambiado su preferencia, relegando de a poco las marcas tradicionales y animándose a probar nuevas marcas de vino que ofrecen otras variedades, cortes y también nuevas zonas de origen de las uvas.
Siempre, por supuesto, buscando la mejor relación entre la calidad y el precio del vino. El consumo de vino ha bajado en los últimos años y para recuperarlo debemos trabajar en crear productos que sirvan para distintas situaciones de consumo, no solamente con comida.
5. ¿Cuáles son los pasos para poder llegar a mercados globales? ¿Franquicia o sucursal propia?
Los mercados globales en la industria vitivinícola son muy diferentes a lo que es el mercado local. La diferencia está en los consumidores. Afuera están acostumbrados a tener acceso a vinos de distintas partes del mundo.
El vino argentino participa de un porcentaje pequeño del mercado global, entonces creo que es clave enfocarse en un par de países y trabajar en el desarrollo del producto.