Casi el 50% de los hoteles de turismo podría cerrar

El 46% de los establecimientos cree que puede cerrar definitivamente o quebrar. Durante la cuarentena se perdieron 74.000 puestos de trabajo en el sector.

Redacción Fortuna

El 46% de los hoteles de turismo cree probable que deba cerrar definitivamente sus puertas como consecuencia del parate por la pandemia y de mantenerse la situación actual.

Un trabajo realizado por la Asociación de Hoteles de Turismo de la República Argentina (AHT) con el aporte técnico del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL), advierte que se perdieron 74.000 puestos de trabajo entre marzo y junio.

Señala también que las economías regionales son las que más sufren este problema ya que para muchas provincias el turismo en un importante fuente del empleo: en algunas llega ser la actividad que tiene el 10% de los puestos de trabajo.

La encuesta se hizo en agosto de 2020 y participaron vía respuesta electrónica 190 establecimientos: 43% hoteles 4 estrellas; 19% son de 3 estrellas; 18% son boutique, y 15% de 5 estrellas.

"Esta situación crítica tiene su paradójica contracara: el 97% de los establecimientos declara que cuenta con protocolos para operar y hacerlo en forma segura si se les permitiera la apertura", indica el informe.

El turismo en la Argentina representa el 5% del PBI. Antes de la cuarentena, traía divisas por u$s 5.200 millones (el 7,2% de los dólares que entran al país) y ocupaba en cuarto lugar en la generación de estos ingresos, después del sector oleaginoso, del cerealero y del automotriz.

También, la actividad ocupaba el cuarto lugar en generación de empleo (con 460.000 puesto formales, que subía a 1.300.000 si se agregan los dueños, el trabajo familiar y el sector informal), con el 7,1%. El primer lugar lo ocupa el comercio minorista; luego la enseñanza, y tercero, la construcción.

"La industria hotelera está atravesando la peor crisis en su historia. Estamos ante una caída del 17% del sector que significa que han dejado de operar casi 4.000 emprendimientos turísticos. Esta dramática cifra, comparada con la caída del 10% en la crisis 2001-2002, resulta un 70% mayor. Esto ha generado que entre febrero y junio se hayan perdido 74.000 puestos de trabajo en el sector", indica Roberto Amengual, presidente de AHT.

"No encontramos casos en el mundo en los cuales el turismo se haya detenido tanto como en nuestro país. Somos una industria federal, en algunas provincias llegamos a representar más de 10% del empleo, somos el tercer sector con mayor proporción de empleo femenino, generamos más empleo joven que ninguna otra industria, somos inclusivos según nivel educativo (empleamos gran cantidad de profesionales pero también muchas personas con secundario completo), y además somos el cuarto sector con menor informalidad entre asalariados privados¨, señala Amengual en base a datos de IERAL.

"Necesitamos volver a trabajar, el 97% de los establecimientos relevados confirma que cuenta con los protocolos para hacerlo en forma segura", afirma el ejecutivo.

A pesar de la pérdida de 74.000 puestos de trabajo desde que comenzó la cuarentena, el 47% de los hoteles no suspendió personal.

Si bien el 50% dijo en agosto que ya está a punto de cerrar o quebrar, los que todavía resisten tienen poco tiempo para sostenerse. "El horizonte termina en 3 meses: el 17% cuenta con autonomía para 2 meses, y el 22%, para 3 meses", explica Amengual.

También se dio un creciente proceso de endeudamiento. En mayo, el 37% tomó líneas de crédito. En agosto, ese porcentaje subió al 59%. "Esto se explica porque en mayo los hoteles, con actividad y facturación nula, estaban recurriendo a su caja para pagar capital de trabajo. Hoy se terminó la caja y 6 de cada 10 debieron tomar deuda para pagar gastos corrientes, que luego será muy difícil de recuperar. Nos preocupa el tipo de crédito que se está tomando, no es para inversión sino para pagar sueldos", sostiene el presidente de la AHT.

"El 94% de los hoteles encuestados solicitó ayuda para el pago de salarios, 52% suspendió inversiones programadas, 47% redujo salarios del personal y tomó créditos bancarios, y un 8% de los hoteles encuestados cerró definitiva y permanentemente su establecimiento", indica el informe.

¨El primer desafío de corto plazo es unir el país, abrir las fronteras internas. A mediano plazo, iniciar la recomposición del turismo internacional. El resto del mundo ya lo inició, y logró reactivar el turismo receptivo entre un 20 y un 30%. En Argentina estamos en 0: no existe antecedente en el mundo de que las provincias y municipios de un país se aíslen de la manera que está sucediendo aquí. Apelamos a la responsabilidad individual del turista, después de casi 180 días de cuarentena ya todos conocemos qué debemos hacer y qué no¨, afirma el directivo.

Ahora, ¿en cuánto tiempo creen los hoteleros que pueden volver a trabajar con normalidad? De cada 10 hoteles, 7 no espera recuperar un ritmo normal antes de entre 12 y 24 meses. En mayo, casi el 50% consideraba que la actividad se recuperaría antes de los 9 meses luego de la reapertura.

"Creemos que el turismo receptivo se va a recuperar recién en 2022. La caída en las expectativas hace que peligre la continuidad de muchos establecimientos. El año que viene la recuperación será muy leve, proyectamos un nivel de ocupación de entre un 15 y un 20%, cuando es necesario que esa tasa llegue al 40% para por lo menos hacer frente a los gastos operativos", detalla.

"Lo que necesitamos es que se fije una fecha fehaciente de inicio de actividades para el turismo. Para poder empezar a vender con certeza no sólo a los mercados nacionales sino también a los internacionales", advierte Amengual.