Así los afirmó el presidente de la compañía, Luis Bameule. Afirma que la media res argentina es más cara que en Brasil y Uruguay y pierde competitividad por las medidas oficiales sobre ganaderia.
El presidente del frigorífico Quickfood, Luis Bameule, afirmó que en las actules condiciones ganaderas de Argentina habrá "carne cara por un buen lapso". El ejecutivo explicó que en el mercado local la media res se está "exorbitantemente alto" dado que cotiza entre U$S 3,7 y 4 por kilo. En cambio, "en el mundo ese precio es 20% a 25% más bajo", dijo.
En cambio, para Brasil y Uruguay es U$S 3,5 y 3,1 respectivamente. "En ninguno de esos dos países los exportadores tienen retenciones. El precio es exorbitantemente alto y no hay manera de ser competitivos en el exterior", dijo Bameule en comunicación con Radio Cultura.
El presidente del frigorífico consideró que en los últimos cinco años "se han deteriorado las expectativas de los productores".
"Frente a una realidad tan grosera como la que hemos vivido, finalmente las autoridades comprenderán cuáles son las normas con las que tiene que manejarse este negocio", reflexionó. Entre esas medidas, Bameule sugirió la eliminación de la necesidad de un permiso previo para exportar.
Además, destacó que "una segunda medida muy clara sería eliminar las distorsiones de precios que en el mercado interno están provocando estas baratas o pseudo baratas, que son volúmenes de carne que se exige a los frigoríficos entregar a precios muy bajos a cambio de tener algún permiso para exportar".
Bameule calculó que por la sumatoria de distintas regulaciones, en el sector se perdieron en el último año de "10.000 a 12.000" puestos de trabajo debido "a la caída grande de la exportación y del consumo".
Con agencias
7/2/2011
