Lo asegura la prensa brasileña, que recoge las frases de los ejecutivos que ya abandonaron la Argentina.
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Cuando la minera brasileña Vale anunció que abandonaría el país y, en consecuencia, el Proyecto Potasio Río Colorado, el 11 de marzo pasado, argumentó que la causa era el "actual contexto macroeconómico" de Argentina y el mundo.
A una semana del anuncio, que provocó un enfrentamiento abierto con el gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, la empresa reveló que la verdadera causa del alejamiento del proyecto fue la seguridad, violentada supuestamente por "amenazas de los sindicatos".
Sergio Leite, CEO de Vale en Argentina, y otro alto ejecutivo de la minera, abandonaron el país y volvieron a Brasil porque "los ánimos estaban muy alterados, incluidas las amenazas de los sindicatos", dijeron fuentes de la empresa al diario O Estado de Sao Paulo.
Leite había sido convocado el viernes pasado al Ministerio de Trabajo, en la Ciudad de Buenos Aires, par dar explicaciones sobre la situación de los empleados que participan en el proyecto, suspendidos desde el anuncio del 11 de marzo. En conferencia de prensa, Carlos Tomada y Julio De Vido lamentaron que los representantes de la empresa brasileña no asistieran al encuentro y dictaron la conciliación obligatoria entre Vale y sus empleados.
