Misión inversora planteó dudas sobre un posible atraso cambiario

En una serie de reuniones con el ministro Prat-Gay y otros importantes dirigentes macristas junto a grupos inversores de Estados Unidos se especuló con un crecimiento recién a fin de año.

Redacción Fortuna

El fuerte ingreso de dólares en busca de rendimientos de cortísimo plazo no sólo preocupa al Gobierno, sino que genera dudas también entre inversores extranjeros a la búsqueda de posicionarse en sectores de la economía real con potencial, como el energético. El riesgo de caer nuevamente en un atraso cambiario, combinado con temores a la política argentina y un grado cierto de incertidumbre respecto de que la economía vuelva a crecer con fuerza antes de fin de año ponen un freno al entusiasmo de los mercados. Esa es, al menos, la conclusión que dejó una misión de representantes de fondos de inversión, economistas, banqueros y funcionarios de Estados Unidos que visitó Buenos Aires a principios de la semana.

La comitiva de 17 integrantes, entre los que se contaron el vicepresidente del FED de Chicago, Dan Sullivan, fue liderada por David Kotok, director del Global Interdependence Center (GIC). Se trata de una entidad que reúne empresarios, banqueros, analistas y fondos de inversión que en la Argentina es representada por Ramiro López Larroy, titular de Integras Capital. Durante su visita, el contingente mantuvo reuniones privadas con el titular de Hacienda, Alfonso Prat-Gay; con el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, y también con el ministro de Energía, Juan José Aranguren.

Atraídos por la nueva política tarifaria, varios de los fondos que se focalizan en ese sector analizaron con el ministro las perspectivas de inversión. Sin embargo, en palabras del propio Kotok, “nadie firmó un cheque”. “La primera discusión ha sido muy buena, el potencial de la Argentina es enorme, en energía por ejemplo, debería estar exportando en vez de importando. Pero nadie firmó un cheque ni hizo una transferencia”, afirmó el enviado del GIC. Y, si bien aseguró estar impresionado por el nivel de los equipos técnicos del Gobierno y también con la velocidad con que se implementaron las reformas en materia cambiaria y subsidios, expuso algunos interrogantes. A saber:

◆ Una de las mayores preocupaciones es la apreciación del tipo de cambio por el alto ingreso de dólares financieros que presionan el dólar a la baja y cómo el Gobierno logrará evitar que se pierda el ajuste logrado con la devaluación.

◆ Asociado a las dudas por lograr una recuperación económica hacia fin de año, las elecciones legislativas de octubre próximo también son fuente de incertidumbre para los inversores. “El Gobierno sólo tiene un año y medio para volver a crecer con fuerza. El panorama es inmensamente positivo si lo logra el punto de inflexión pero de altísimo riesgo si no lo logra”, expuso Kotok.

◆ Si bien aceptan el argumento oficial de desaceleración de la inflación core, la caída contundente de la inflación medida con un índice creíble es ahora la condición sine qua non para la llegada de inversiones. “Cumplido esto, los inversores dudarán menos”, aseguraron los visitantes.