Por Jairo Straccia | El cambio es tenue, pero tranquilamente podría ser una razón para que celebren en la Casa Rosada.
El cambio es tenue, pero tranquilamente podría ser una razón para que celebren en la Casa Rosada. Porque según el estudio de confianza del consumidor que realiza la consultora Ipsos junto a Thomson Reuters, la confianza del consumidor mejoró por primera vez desde que asumió el presidente Mauricio Macri.
El indicador general, que refleja un promedio de cómo la gente percibe su situación personal, su capacidad de compra y la perspectiva laboral, subió 2,2% en mayo, luego de tocar un pico entre diciembre y enero y caer todos los meses subsiguientes. Se había dado tras la asunción del gobierno de Cambiemos un “pico de expectativas”, según explicó Luis Costa, director de Ipsos a cargo de la encuesta que se realiza en toda la región. Desde entonces, en sintonía con los aumentos de tarifas, la suba de precios y la caída del poder adquisitivo, el indicador había pasado de 55 puntos hasta 45 puntos en abril. Pero ahora, en mayo, tuvo un pequeño rebote hasta los 47 puntos.
En la misma proporción rebotaron los subíndices que miden la situación económica actual (trepó 23,1%), las expectativas individuales y generales (que saltaron 4,5%) y el clima de inversión en bienes durables, que mejoró un 2,9%.
El único punto negro que no repunta, y de hecho tuvo un descenso en el margen, es el referido a la seguridad laboral, que cayó un 0,3%, en pleno debate en el Congreso por la ley antidespidos impulsada por el Frente para la Victoria, negociada con modificaciones por el Frente Renovador y resistida por el oficialismo de Cambiemos. Según Costa, el Gobierno “tiene margen” para revertir por completo los indicadores, aunque camina en una cornisa donde las fuertes expectativas tras la salida de CFK pueden transformarse en decepción si no hay mejoras rápidas.
Nota publicada en la edición impresa del Diario PERFIL.
