Por Patricia Valli | Negoció el “pacto antidespidos” y hoy tiene orden del Presidente de anunciar una “inversión día por medio”. En la mira por la inflación, presentó una web para los precios.
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En medio de discusiones por despidos, inflación y la caída de la actividad económica, el Gobierno buscó capitalizar los “planes de ampliación” que le transmitían las empresas e intentó pasar a una “agenda positiva” para dejar de correr detrás de las demandas –algunas políticas, otras simplemente generadas por las propias medidas oficiales–.
Así, en una reunión de la que participaron Mauricio Macri; su jefe de Gabinete, Marcos Peña; sus asesores económicos Mario Quintana y Gustavo Lopetegui y el ministro de Producción, Francisco Cabrera, se decidió hacer que las empresas confirmaran los planes de inversión y empleo para correr la discusión del tema de los despidos.
Así, entre sábado y domingo pasados empezaron los llamados a los empresarios y el lunes se gestó el Compromiso por el Empleo que firmaron unas 200 empresas inicialmente. Hoy ya son mil, aseguran en el Gobierno.
Después de un pase de factura desde el núcleo duro industrial, la Asociación Empresaria Argentina (AEA) que se quejó por la falta de un interlocutor, el pedido fue concentrarse en la agenda interna y capitalizar las inversiones anunciadas y que quedaron en el tintero, que se estiman en US$ 20 mil millones.
El objetivo de Macri es llevar adelante un anuncio de inversión día por medio. Esta semana el presidente participó del anuncio de General Motors, mientras que Cabrera recorrió empresas en Tres de Febrero y participó de una feria de maquinaria en Tecnópolis para corolar su gira pyme. “Este es el momento de que los empresarios digan lo que piensan para no caer en falsas situaciones”, dijo ayer el funcionario que se alejó así de las revistas del corazón y el apodo de “latin lover” que, se dice, le puso el mismo Macri.
Ese recorrido hoy incluye a las 500 grandes. Y pese a que existe una agencia de promoción de inversiones en el ámbito de Producción, reconocen que si se suman fondos del exterior, será en una segunda oleada.
En ese plan de “aterrizar las inversiones que ya existen” potencialmente, Cabrera incluso acompaña personalmente a los empresarios que necesitan un empujoncito hasta los despachos de Lopetegui y Quintana, que monitorean el variopinto gabinete económico donde, con más de media docena de economistas de distintas vertientes, hay ideas encontradas sobre la velocidad del ajuste y la recuperación de la actividad.
Una de las banderas proactivas que esgrimió el Gobierno apuntó a las Pyme, un sector hasta ahora condicionado por la política de tasas altas de Federico Sturzenegger en el Banco Central para frenar la inflación, además de la caída de la actividad y la apertura de importaciones. “Queremos ser el Gobierno que le cambie la vida a las Pyme”, dijo el miércoles, ante la Cámara Argentina de la Mediana Empresa. Y en un raid televisivo, el ministro incluso defendió la política fiscalista del Gobierno para contener la inflación. Después del 6,5% de abril que aumentaron los precios en la Ciudad, incluso anticipó que en mayo, la inflación será del 3,2%.
La suba de precios, pese a que es traccionada –sobre todo en la Ciudad– por los aumentos de tarifas en servicios públicos, transporte y combustibles, es hasta ahora el punto más cuestionado de su gestión. Ayer Comercio puso en marcha una web para comparar precios y ciberformular el “camine, camine” que Miguel Braun retomó de la Liga de Amas de Casa.
En tanto, el intento de debate por la ley antidespidos siguió corriendo la agenda positiva, con la postergación de la devolución de IVA para la canasta básica, que se trataría este miércoles en una sesión donde también se incluiría el paquete para Pymes que promueve Cabrera: créditos blandos de la mano de ampliación al 15,5% de la cartera de los bancos para la línea de Inversión Productiva (hoy en 14%), liquidación del IVA cada 90 días y elevación de los mínimos de IVA, entre otros puntos, como el plan “Mi primer crédito Pyme”, fondeado por el Banco de Inversión y Comercio Exterior.
Triaca, contra el derecho a huelga
El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, salió una vez más al cruce de la ley antidespidos e incorporó un punto más al temario que no tardó en generar polémica: la posibilidad de descontar los días de paro.
De cara a la reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil del próximo jueves, sostuvo que adicciones y ausentismo estarán en la agenda pero también consideró que habría que “darle una chance al debate” a eventuales descuentos por ejercer el derecho a huelga.
Las respuestas del lado sindical no tardaron en llegar. “¿Qué parte del derecho constitucional de los trabajadores a la huelga desconoce el ministro de Trabajo?”, se preguntó el secretario general de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), Hugo Yasky.
Otro de los puntos a atacar según Triaca es el ausentismo y las adicciones que preocupan a los sectores industriales.
En tanto, el funcionario volvió a desestimar que haya una ola de despidos y aseguró que mientras que en 2002 “hubo mil procedimientos preventivos, hoy hay sólo 14”.
Con el sello de Pensar
Con el proyecto para pymes a la cabeza, el ex titular de la Fundación Pensar quiere aprovechar el momento y en su entorno aseguran que es “el anuncio de la década”. Con una ampliación de $ 63 mil millones y una tasa del 22%, las pequeñas y medianas empresas reconocen un alivio aunque mantienen sus reparos frente a lo que puede ser el impacto de las importaciones.
En el entorno de Pancho Cabrera, en tanto, prometen que no se repetirán “los errores de los 90”, si bien reconocen que se aprobó el stock de DJAI de la gestión anterior, lo que generó un mayor ingreso de productos del exterior.
“Ahora el flujo no es tan grande”, aseguran.
Nota publicada en la edición impresa del Diario PERFIL.
