La coparticipación a la provincias cayó 29% en abril y 25% en mayo. También Ingresos Brutos sufrió una fuerte baja por la pandemia. Galería de fotos
La cuarentena por la panemia del coronavirus afectó las cuentas públicas, no sólo por la caída de la actividad y el consumo, sino también por el aumento de los gastos corrientes para ayudar a las familias y empresas y por la caída en la recaudación nacional, que ya venía afectada dos años antes por la recesión.
Un informe de LCG, indica que en abril y mayo, cuando el aislamiento social obligatorio se mantuvo el mes entero, la baja en términos reales fue del 23% en abril y del 22% en mayo, mientras que la medición del primer trimestre comparado con el mismo período de 2019 la baja fue de 6,5%.
La caída en la recaudación a nivel nacional repercutió no sólo a la Nación sino también a las provincias por el ajuste en la coparticipación, que tuvo una caída del 29% en abril y del 25% en mayo medidas anualmente en términos reales.
A ese deterioro hay que sumarle lo que sucedió en la recaudación interna de las provincias, que sufrieron fuertes bajas con un aumento del gasto corriente. "Solo se conocen los datos de la recaudación correspondiente al mes de abril de 14 provincias. La baja promedio fue de 24% anual,y como era de esperar, en todos los casos la caída real fue ampliamente superior al mes anterior (-12% promedio)", indica el informe.
Las más perjudicadas fueron Río Negro y San Luis, con caídas del 35% anual. Sin embargo, en todos los casos la baja es de dos dígitos en términos reales: la que menos cayó fue Catamarca, con un 11% real en abril.
"En todas las provincias, la recaudación de Ingresos Brutos mostró bajas reales elevadas: entre 11% y 28% anual, con excepción de Catamarca. El dato no sorprende debido a que el tributo se encuentra atado a la evolución de la actividad, pero sí preocupa considerando la importancia relativa que tiene dentro de las recaudaciones provinciales", señala este trabajo.
En el momento en que se hizo el estudio, las seis provincias que publicaron datos mostraron caídas reales. La Ciudad de Buenos Aires fue la excepción ya que registró un aumento del 12% interanual real que se explica por una suba del 29% i.a. real de Ingresos Brutos por el aldeanto del pago de los bancos.
En el extremo opuesto está Santa Cruz, con una baja nominal del 16% anual, que en términos reales significa un desplome del 41% anual.
En vista de estos problemas, y a pesar de las transferencias discrecionales a provincias desde Nación que aumentaron notablemente en los últimos dos meses, se estableció un Programa de Emergencia Financiera Provincial, por el que se transferirán fondos por un total de $ 120 mil millones ($ 60.000 millones como aportes de Tesoro Nacional y otros $ 60.000 millones como asistencia financiera, que deberán ser devueltos con intereses).
"Sin embargo, estos montos lucen escasos si se considera que sólo el gasto en personal de las provincias asciende en promedio a $ 170.000 millones mensuales. La flexibilización de la actividad en casi todo el país a partir de mayo podría comenzar a matizar el desplome en la recaudación registrado estos meses, sobre todo en el interior del país. No obstante, el bajo dinamismo en varios sectores, a partir de limitaciones operativas y una menor demanda agregada, seguirán afectando a los ingresos provinciales. La asistencia nacional para hacer frente a sus gastos corrientes mensuales, afectados por los mayores compromisos que supuso la lucha contra la pandemia seguramente seguirá en ascenso", finaliza el reporte.