La comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados emitió hoy dictamen de mayoría a favor del proyecto del Poder Ejecutivo que suspende durante un año, la llamada "ley cerrojo" con lo que se permite reabrir el canje de títulos de la deuda.
La iniciativa sería aprobada mañana en el recinto y girada al Senado. El despacho contó con el apoyo de los diputados del Frente para la Victoria que integran la comisión que preside Gustavo Marconato y se sumó el respaldo del bloque del PRO, luego que el oficialismo aceptara sugerencias del diputado Luis Galvalisi.
La Coalición Cívica y Proyecto Sur no suscribieron el dictamen propuesto por el oficialismo y presentarán dictámenes de minoría, en tanto el radicalismo, que estuvo en la reunión de la comisión representado por Miguel Ángel Giubergia y Silvia Lemos, manifestó su oposición pero los diputados indicaron que tenían que definir en el bloque como expresarán su postura.
El único cambio relevante que tuvo el proyecto en el dictamen suscripto por el oficialismo está en el artículo 5to., en el que -atendiendo a una observación que había planteado Galvalisi- se estableció que los tenedores de títulos que participen en el nuevo tramo del canje deberán renunciar a acciones judiciales o arbitrales iniciadas o por iniciar contra el país.
La iniciativa del Poder Ejecutivo pretende suspender hasta el 31 de diciembre de 2010 o hasta que el Gobierno declare finalizado el proceso de reestructuración de la deuda, el efecto de la llamada "ley cerrojo" que el Congreso sancionó en 2005 promovida por el entonces ministro Roberto Lavagna.
Los tenedores que no ingresaron al primer canje poseen bonos por alrededor de 20 mil millones de dólares y quienes estén interesados en participar en el segundo deberán suscribir un bono con un quita superior a la que se instrumentó en la primera propuesta, que fue del 65 por ciento, a un plazo de 20 años.
El proyecto para suspender la "ley cerrojo" constituye un requisito indispensable para que la Argentina pueda llevar adelante la reapertura del canje de deuda defaulteada a fines del 2001, que permitirá que los tenedores de esos títulos que no ingresaron al canje realizado en 2005 puedan hacerlo ahora.
En el texto enviado por el Poder Ejecutivo se precisa que "los términos y condiciones financieros que se ofrezcan no podrán ser iguales ni mejores que los ofrecidos a los acreedores" en el canje de 2005.
A su vez, se prohíbe "ofrecer a los tenedores de deuda pública que hubieran iniciado acciones judiciales, administrativas, arbitrales o de cualquier otro tipo un trato más favorable que aquellos que no lo hubieran hecho".
Una vez aprobado el proyecto, la Argentina avanzará en la negociación con los bancos que llevarán adelante el canje -Deutsche, Barclays y Citi- e informará a las comisiones de valores de los Estados Unidos, Europa y Japón sobre la operatoria de sustitución de los bonos en default.
3/11/2009
