Una caravana de motos llegó al corazón de un yacimiento a 4.500 metros de altura. Mirá el video. Galería de fotos
26 motociclistas, 152 kilómetros de ripio, 8 grados bajo cero y 4.500 metros de altura. Las cifras resumen la impronta de una experiencia inédita en el país, que tuvo a la Cordillera de Los Andes como escenario.
Fue el pasado 28 de octubre, cuando se abrió el camino a los motoqueros a las 7 de la mañana hacia la mina Veladero, en San Juan, y que fue el puntapié a una tendencia ‘off road’ que crece en el mundo: el turismo minero.
El grupo de 26 enduristas recorrió los 152 kilómetros que separan la localidad sanjuanina de Tudcum hasta el hotel minero en la cima de la montaña. Con temperaturas que llegaron a los 8 grados bajo cero, los motociclistas arribaron al ‘open pit’, como se conoce el lugar en el que se desarrolla la mina a cielo abierto. Desde allí se fotografiaron con el paisaje que ofrece la Cordillera de los Andes a 4.500 metros de altura (en el departamento de Iglesia) y recibieron explicaciones de cómo se trabaja en una mina.
Uno de ellos es Gustavo Jury, de 51 años y profesor en la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ), amante de las travesías en motos. Cuenta que participó con otros cuatro amigos de la experiencia: “Teníamos una gran curiosidad, porque conocemos bien los caminos de la provincia; pero no éste, porque no era accesible hasta ahora.Nadie lo conocía y fue una sorpresa transitarlo y disfrutar los increíbles cambios de paisaje que ofrece la montaña”, relata a Perfil.com.
Si bien afirma que “se hizo agradable” la travesía, confiesa que hubo cuestas complejas de transitar por ser “trepadas abruptas con bajadas complicadas”. Igualmente no hubo que lamentar bajas, y mucho tuvo que ver el riguroso esquema de seguridad armado por los organizadores, el mismo que aplican a los trabajadores de Mina Veladero y sus proveedores, como equipamiento con oxígeno, un tráiler y hasta una ambulancia que los acompañó en todo el trayecto.
Incluso, los participantes de la caravana debieron someterse a un chequeo médico previo para garantizar su aptitud física y, antes de comenzar la subida, recibieron varias recomendaciones de seguridad para transitar por el camino minero, afrontar las temperaturas bajo cero y ráfagas de viento en plena cordillera, típicas de la zona.
Por eso vehículos de asistencia mecánica y de salud acompañaron a los motoqueros durante toda la travesía que concluyó con el arribo del grupo al Hotel Veladero y con la visita al corazón de la mina, donde observaron a pocos metros cómo se trabaja en la zona de explotación, denominada filo Federico.
La travesía fue una prueba piloto y forma parte del Programa Mina Abierta impulsado por Mina Veladero. “Ha sido la primera actividad de muchas otras que vendrán, no solo deportivas sino también de carácter cultural y recreativo. Veladero es de los sanjuaninos y queremos que todos la conozcan”, prometió Fernando Giannoni, Director Ejecutivo de la compañía. “El objetivo es que Veladero sea un emprendimiento de puertas abiertas. Tenemos la responsabilidad de mostrar lo que hacemos y abrir las puertas de la mina”, concluyó.