Una encuesta revela que muy pocos empleados que hacen home office recibieron apoyo de su empresa. Un 51% seguiría con esta modalidad luego de la cuarentena.
Una informe revela que sólo el 4% de los que hacen home office recibieron ayuda de su empresa para cubrir algunos de sus gastos y, sin embargo, el 51% dijo que seguiría trabajando en sus hogares.
Ese 4% que recibió apoyo de su empresa para hacer teletrabajo incluyó entre en esa ayuda los siguientes puntos: internet o línea de celular, comidas durante la jornada laboral y equipamiento de oficina, como la computadora y la silla ergonómica.
Una encuesta realizada por Adecco Argentina, que incluyó a 3.800 empleados que están hace más de cien días están trabajando desde sus casas, el 51% seguiría con esta modalidad después de la cuarentena, mientras que el 12% dijo que no seguiría y que el 36% no tuvo la posibilidad de hacer teletrabajo durante el aislamiento social obligatorio. Al principio de la cuarentena, la consultora había realizado un estudio que determinó que el 56% hacía home office por primera vez.
Para el 60%, el teletrabajo tiene las mismas dificultades para los padres como para las madres de familia; 3 de cada 10 dijo que era más difícil para las madres y el 3%, para los padres. Además, el 57% pensó en algún momento de la cuarentena que estaría "bueno vivir en algún pueblo o ciudad menos poblada".
Sobre la posibilidad de elegir los días para trabajar en casa, el 22% dijo que lo haría todos los días y que sólo iría a la oficina por temas importantes; un 28% prefiere ir tres veces por semana al trabajo; 15% iría 2 veces por semana a la oficina; 14% prefiere ir todos los días al trabajo; 5% le gustaría ir sólo una vez por semana al trabajo, y el 16% no puede hacer home office por el tipo de actividad que realiza.
Las dificultades para el trabajo en el hogar que enumeraron los encuestados figuran: lograr mantener una rutina estable (28%), tener una buena conexión a Internet (24%), trabajar con la familia alrededor (21%), trabajar solo (10%), las exigencias del trabajo (8%), las actividades de la casa (6%), y ayudar a los chicos con las tareas del colegio (3%).
Respecto de si el home office altera el balance entre vida personal y laboral, el 47% dijo que eso dependía de cómo se organizaba cada uno; el 28% dijo que le resultaba complicado, mientras que el 18% señaló no tener problemas.
“Una de las principales tareas para teletrabajar es definir horarios. Es necesario tener una rutina laboral con tiempo de descanso. Es muy importante hacerlo y aún más cumplirlo”, explicó Alexandra Manera, directora de Recursos Humanos del Grupo Adecco Argentina & Uruguay. “Estar en línea todo el tiempo también cambiará la jornada laboral típica. En un futuro no muy lejano dejarán de existir las jornadas laborales de ocho horas. Esto requiere que los empleados establezcan límites claros, distribuyendo su tiempo familiar, tiempo personal, tiempo libre y horas de sueño”, agregó Manera.