La presidenta Cristina Fernández viajó a Río de Janeiro y, al igual que en España, volverá a negar las amenazas de restricción. Brasil pedirá garantías pero tampoco tiene ánimo de confrontar porque está en plena campaña electoral.
El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva pedirá garantías a la presidente argentina Cristina Fernández quien se encuentra de viaje por Río de Janeiro para participar del III Foro de la Alianza de las Civilizaciones.
Contexto: Brasil tomará represalias si Argentina restringe importaciones de alimentos
Por su parte, la presidenta argentina buscará hoy aflojar tensiones y pedirle a su par Lula da Silva que no adopte medidas contrarias a la integración bilateral. El Cronista y Ambito Financiero coinciden con que el mandatario brasileño exigirá garantías de que la medida transmitida por el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, a los supermercados no seguirá vigente.
El conflicto volvió a escena luego de las declaraciones del secretario de Comercio Exterior de Brasil, Welber Barral, quien amenazó con aplicar represalias a la Argentina, si se concretaba la medida anunciada por Moreno. Si bien las advertencias del funcionario se llevaron a la práctica durante unos días, en los que varios camiones y buques quedaron varados en la frontera a la espera de la autorización del funcionario, las declaraciones de la Presidenta y parte del gabinete negando la medida hicieron que comience a flexibilizarse.
Archivo: Freno a importaciones: Ponen en juego exportaciones por U$S1.750 M
Por su parte, la ministra de Industria Débora Giorgi informó en un comunicado que “no hubo ninguna presentación formal de queja de Brasil” y resaltó que en el primer cuatrimestre de 2010 “el flujo comercial creció 48% interanual” y que el “saldo comercial resultó deficitario para la Argentina en U$S859 millonesss”. En los primeros cuatro meses del año, las exportaciones a Brasil totalizaron u$s 4.096 millones, un 39% más que el año pasado, en tanto que las importaciones fueron por u$s 4.955 millones, un 57% superior a 2009”, señala el documento.
La decisión de Moreno de revisar el otorgamiento de permisos sanitarios a todos los productos alimenticios que ingresan en el país quedó parcialmente plasmada en una carta que envió el 23 de abril al director del Instituto Nacional de Alimentos (INAL), pero no fue notificada formalmente como restricción ni a los importadores ni a los socios comerciales del país. “Por eso, Brasil dice que sólo si se comprueban las trabas se aplicarán las correspondientes represalias”, asegura La Nación.
En tanto, Clarín suma el dato que la presión de los grupos privados sobre el gobierno brasileño se acentuó. La Federación de Industrias del Estado de San Pablo (Fiesp) insistió que las exportaciones de alimentos al mercado local sufren restricciones por cuenta de una medida verbal enunciada por el secretario de Comercio Guillermo Moreno hace dos semanas. A esta corresponsal le indicaron que el daño no es visible en las fronteras entre ambos países donde no hay camiones parados.
ADVERTENCIA
El canciller brasileño, Celso Amorim, advirtió que si la Argentina mantiene sus trabas al ingreso de productos desde el Brasil habrá “consecuencias”. "Dicen que algunas autoridades argentinas estimularon a los supermercados a comprar productos nacionales, es algo de lo que no gustamos, y va a acabar teniendo algún tipo de consecuencias", señaló Amorim en declaraciones difundidas por la agencia Ansa.
28/5/2010
