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Aunque el SUBE se creó el febrero de 2009, la CNRT publicó hoy las normas que debe cumplir: en los colectivos se instalará un lector que funcionará junto con el sistema de pago con monedas. Hoy sólo funciona sólo en 7 líneas de colectivo y 12 estaciones de tren.
Un año y un mes después de la creación del Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE), la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) publicó las normas que deben cumplir las terminales electrónicas que validen los pasajes, las cuales deberán coexistir con aquellas expendedoras de boletos receptoras de monedas. Así lo dio a conocer este un organismo descentralizado -dependiente del Ministerio de Planificación- a traves de la resolución 97 que publicó este lunes el Boletín Oficial.
La CNRT resolvió que deberá instalarse una doble consola con el objeto de independizar ambos sistemas existentes, permitiendo la operatoria cualquiera sea la alternativa utilizada por los usuarios. El SUBE permite al transporte de pasajeros, trenes o colectivos, prestar el servicio a instancias de la presentación de una tarjeta magnética que cuenta con un sistema de prepago por parte del usuario.
Las máquinas encargadas de validar las tarjetas podrán ser instaladas en terminales o en las mismas unidades del autotransporte. No obstante, la resolución publicada no establece una fecha límite para que se produzca este recambio.
No obstante, hasta ahora el sistema SUBE viene funcionando sólo en 7 líneas de colectivo (de las 340 líneas que operan en la Ciudad de Buenos Aires) y 12 estaciones de tren, pero no tiene terminales propias.
SUBE está dotado de tarjetas, todavía no tiene lectores propios para instalar en líneas y sólo funciona en sistemas de lectores magnéticos ajenos: “Monedero”, de Roggio -que también tiene convenio con las líneas de colectivo 5, 8, 20, 50 y 101-; Ferrobaires (FF.CC. Belgrano Norte), que tiene su propio sistema y las líneas 61 y 62, del Grupo Plaza, que ya contaban con sus propios lectores a través de un acuerdo firmado con Siemens.
Es decir, actualmente existen 700.000 usuarios de los 5 millones proyectados originalmente.
El SUBE nació a través del decreto 84/2009, cuando la presidenta Cristina Fernánez anunció que sería “implementado en 90 días” para 5 millones de pasajeros que se movilizan en Capital Federal y el conurbano bonaerense. Tres meses más tarde el sistema no funcionaba. Su arranque fue recién el 20 de junio de 2009. La demora en la implementación fue a raíz de la dilación en la licitación para adquirir 5 millones de tarjetas magnéticas, que terminó ganando la alemanda G&D.
Expansión
En enero la Secretaría de Transporte anunció que el SUBE se expandirá a las líneas 28, 6, 12, 23, 39, 102, 150, 151, 168, 86, 57, 88, 129, 194 y 195, aunque aclaró que “la implementación llevará todo el 2010″.
15/3/2010
