Se termina el año y el estrés acumulado de todos estos meses comienza a manifestarse en el cuerpo. La Dra. Patricia Isgro, especialista en Medicina Biológica, explica cómo abordar la fatiga característica de fin de año y, sobre todo, cómo prevenirla.
Con la temporada de fin de año en el horizonte, la medicina biológica puede ser una aliada para combatir la fatiga crónica que afecta a muchas personas en este último tramo del año. Este enfoque médico se centra en comprender de manera integral al paciente, reconociendo que el estrés crónico puede desencadenar problemas relacionados con la fatiga adrenal, una disfunción de las glándulas suprarrenales.
La Dra. Patricia Isgro, especialista en Medicina Biológica, destaca la importancia de un diagnóstico preciso para abordar este problema. "Antes de tomar cualquier medida, es primordial solicitar un estudio de laboratorio completo para medir el estrés oxidativo del paciente pero, sobre todo, es esencial escucharlo para poder determinar que está causando su cuadro", afirma la Dra. Isgro.
Cuando el cuerpo humano experimenta estrés, sufre un proceso de oxidación que resulta en un desequilibrio bioquímico significativo. Para contrarrestar esto, se recomienda la administración de antioxidantes que el cuerpo necesita. “Con los resultados de los estudios y lo que el paciente me cuenta, podemos saber con exactitud cuáles son los antioxidantes que hay que brindarle al cuerpo”, explica la doctora.
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A corto plazo, el estrés puede ser beneficioso, ya que desencadena reacciones bioquímicas que preparan al cuerpo para enfrentar desafíos. Sin embargo, el estrés crónico puede llevar al mal funcionamiento de las glándulas suprarrenales, ya que el cuerpo permanece en estado de alerta constante.
"Prevenir la oxidación celular es esencial", enfatiza la especialista en Medicina Biológica, y agrega: "Es crucial que las personas que estén experimentando situaciones de estrés puntual busquen atención en un médico entrenado en longevidad y calidad de vida para evitar problemas a futuro".
La fatiga experimentada a fin de año puede verse agravada por factores como la mala alimentación, tal como el consumo excesivo de azúcares y harinas; y el sedentarismo y la falta de actividad física. La gestión adecuada de las emociones también desempeña un papel importante, ya que las reacciones negativas pueden contribuir al cansancio extremo.
Para prevenir el agotamiento, se recomienda el Well Aging, un enfoque preventivo diseñado para mantener la calidad de vida a lo largo del año. Este programa incluye un plan personalizado que aborda la energía, proporciona antioxidantes, regula el equilibrio bioquímico y fomenta el bienestar emocional y la actividad física para promover la producción de hormonas positivas.
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En casos de agotamiento extremo, los pacientes pueden recurrir a la antioxidación mediante sueroterapia. “Este es uno de los tratamientos más innovadores para combatir el estrés”, detalla la Dra. Patricia Isgro, y agrega: “Este tratamiento revitalizador implica la infusión de antioxidantes, nutrientes, minerales y vitaminas a través de la sangre para restaurar la energía y el equilibrio bioquímico”.
La fatiga puede manifestarse de diversas maneras en cada individuo, desde dificultades para levantarse por la mañana hasta problemas de sueño, irritabilidad, síntomas físicos como sequedad en la piel y pérdida de cabello, e incluso aumento de peso debido a la retención de líquidos causada por el estrés.
"La fatiga de fin de año es un asunto interno que requiere atención y cuidado”, dice la Dra. especialista en medicina biológica, y concluye: “Es fundamental enfocarse todos los días en intentar mejorar los pensamientos, que sean menos negativos y más positivos porque esto repercute de forma directa en nuestra calidad de vida”.
