Economistas niegan que la inflación mejore la calidad de vida. Los que logran subas salariales mayores al alza de precios, como Camioneros, sienten mejoras pero son acotadas en el tiempo.
Por Carmen López Imizcoz *
“La inflación está controlada y facilita la movilidad social”, disparó el líder de la CGT, Hugo Moyano y generó el repudio de los economistas, que sostienen que es imposible mejorar el pasar económico de los argentinos, en forma sostenida, si los precios suben al 25% anual. Moyano dijo una media verdad. Sólo se refiere a la porción de los trabajadores registrados cuyos salarios lograron superar momentánemante la suba de precios. Para los trabajadores informales y los que están por cuenta propia, los analistas suponen que, si hubo movilidad social, fue descendente.
El pensamiento económico de quien dirigirá el peronismo bonaerense desde esta semana, o “Moyanomics”, oscila entre la queja por la suba de precios y la defensa fervorosa de la política económica K. Aunque descree de los índices oficiales, endilga las presiones inflacionarias a los empresarios, que “suben los precios por si acaso”, y sostiene que “el Gobierno no tiene nada que ver con la inflación”.
Por momentos, el titular de la CGT hasta se atreve a decir que “en un país que crece, la inflación no es mala”, pero, por otros, se queja de que la suba de precios es “una realidad que se palpa todos los días”.
El líder de la CGT sostuvo la semana pasada que “es peor la ‘inflación cero’ con ajuste, que la inflación actual, que permite la movilidad social”. Sin embargo, los manuales de economía rechazan la visión de Moyano y sostienen que la inflación perjudica, en primer lugar, a los sectores de menos recursos.
BAJO CONTROL
“No existe una inflación controlada de 25%”, consideró Ricardo Delgado de Analytica al ser consultado por diario PERFIL. “El Gobierno puede anclar el dólar –por el exceso de divisas de la cuenta corriente y las reservas del Banco Central– pero esta realidad podría desaparecer en 2012”, explicó Delgado.
En sintonía, Nuria Susmel de FIEL consideró que la suba de precios no está controlada, ya que se espera que alcance 25% este año y 27% en 2011.
MEJORA
“Es ingenuo, por lo menos, creer que la inflación contribuye a la movilidad social”, sostuvo Delgado, para quien Moyano “olvida que 35% de los asalariados y muchos cuentapropistas están fuera de la protección del empleo formal.”
“Lo que plantea Moyano es cierto a medias”, opinó Victoria Giarrizzo del CERX. “Las subas de salarios y precios generan movimientos en la escala de ingresos, pero muy asociados a los sectores con más poder de negociación”, apuntó Giarrizzo. Por eso, “la movilidad por inflación es sólo un cambio de figuritas, no mejora la distribución del ingreso ni está asociada a méritos del grupo social que asciende, por lo que, en este caso, sería no del todo justa ni genuina”, consideró la economista del CERX. Además, “la visión de Moyano es individualista porque Camioneros obtuvo altos resultados en las paritarias”, concluyó.
Factores excepcionales –como la Asignación Universal por Hijo, la moratoria previsional, la suba de los términos de intercambio y la apreciación del pesoz– evitaron que la aceleración de la inflación desde 2007 deteriorara la situación social. Pero, de ahora en más, es difícil que el Gobierno evite que la inflación erosione la situación social.
“El proceso inflacionario estuvo acompañado de una suba en los salarios reales del sector formal porque había un colchón de competitividad que se está perdiendo”, explicó Delgado. “El trabajador formal está mejor que hace cuatro años. En cambio, sobre quienes trabajan en negro recayó el grueso de la crisis de los últimos dos años y recién con la AUH recuperaron ingresos”, remató.
*De la redacción de Diario Perfil
15/8/2010
