El rendimiento estelar de la empresa contribuyó significativamente a las ganancias del S&P 500, representando casi el 30% de su rentabilidad en lo que va de año.
Luego de tres caídas consecutivas, la empresa de software NVIDIA, busca comenzar su recuperación en la Bolsa de Nueva York. Este martes 25, las acciones de la compañía rebotaban un 4,72% al momento de publicarse esta nota y alcanzaban los US$ 123,68.
Las acciones de Nvidia estuvieron en alza, disparándose casi un 139% durante el año pasado. Los chips de la compañía impulsan los sistemas de inteligencia artificial, incluida la inteligencia artificial generativa, la tecnología detrás de ChatGPT de OpenAI que puede crear texto, imágenes y otros medios.
"Lo que vemos con Nvidia es la volatilidad típica, que se espera cuando una acción sube tan rápido como lo hizo la de Nvidia", comentó Jochen Stanzl, analista jefe de mercado de la plataforma comercial CMC Markets a CNN. "Se han descontado muchas buenas noticias. Ahora los inversores han comenzado a tomar ganancias y parecen preferir vender acciones con el mejor rendimiento en lo que va del año", agregó.
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El frenesí en torno al potencial de la IA para cambiar radicalmente la forma en que vivimos y trabajamos (y generar grandes retornos para los inversores) impulsó gran parte de los retornos del mercado de valores durante el último año y medio.
En ese sentido, NVIDIA es miembro de los llamados Siete Magníficos, las empresas tecnológicas de megacapitalización cuyas acciones superaron con creces el repunte general del mercado de valores estadounidense el año pasado. El índice S&P 500 subió un 24,2% en 2023, en comparación con el aumento promedio del 111% de las acciones de los Siete Magníficos.
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¿Un tropiezo que no es caída?
En los últimos días, Nvidia perdió brevemente su corona como la empresa más valiosa del mundo que cotiza en bolsa luego de que sus acciones se desplomaran casi un 13% la semana pasada. Incluso, en el inicio de la nueva semana, los títulos de la empresa caían un un 6,7%, marcando su tercer día consecutivo de caídas.
Se especulaba que la contracción podría estar marcando un enfriamiento en el entusiasmo de los inversores por el papel crucial que se espera que desempeñe la compañía en la revolución de la inteligencia artificial. Algunos analistas del mercado atribuyen la reciente baja a un cambio en la estrategia de los inversionistas, quienes estarían rotando sus inversiones desde acciones de inteligencia artificial de alto rendimiento hacia otros sectores a medida que 2024 se acerca a su mitad.
Habrá que observar si el bajón sufrido es una tendencia que puede profundizarse o si simplemente fue un tropiezo sin muchas más consecuencias.
