¿Se llegará a estatizar la cerealera Vicentin?

El presidente Alberto Fernández no descartó la posibilidad de que la cerelera pase a manos del Estado. La propuesta a los acreedores comerciales.

Redacción Fortuna

La situación de Vicentin parece cada vez más complicada, en especial cuando el presidente de la Nación, Alberto Fernández, no descartó una decisión crucial: la estatización de la cerealera. Cuando en el C5N se le preguntó al mandatario sobre la posibilidad de que el Estado tome a su cargo la firma, respondió: "Tengo claro que es una empresa muy importante y es fuente de trabajo de mucho gente. Nadie quiere que la fuente de trabajo se cierre y todo indica, cuanto menos, que allí hubo un acto de enorme irresponsabilidad. Así que, vamos a estudiar bien el tema...”. No dijo que no. A esto se suman los pedidos de los sectores más duros del kirchnerismo e incluso de Juan Grabois, líder intransigente de los movimientos sociales, que directamente pidieron que Vicentin pase a manos del Estado.

Esto movilizó a los directivos de la empresa. Por un lado, hubo una propuesta a los acreedores comerciales reunidos en el frente Sumando Cabezas, unos 150 productores y corredores, que fue considerada informal y poco satisfactoria. Por otro, se decidió que la firma vendiera algunos de sus activos, pero hasta ahora no logró una propuesta que convenciera al directorio de Vicentin.

A esto se sumó que el Banco Nación, donde la firma tiene una deuda de $ 18.258.859.000, y el Macro, del que recibió un crédito por $ 612.521.000, calificaran a estos préstamos en situación 4: con alto riesgo de insolvencia. Otras tres entidades, el BICE (por un préstamo de $ 304.767.000), el Banco Hipotecario ($ 736.708.000) y el Santander ($ 197.631.000), ubicaron estas deudas en situación 2: con seguimiento especial. El resto de las entidades nacionales (entre ellas el Banco Provincia y el Banco Ciudad) mantenían hasta las 19 hs. de hoy en el rango 1: situación normal.

Además de los problemas con los bancos y sus acreedores comerciales, a Vicentin le pesa también una investigación que comenzó la AFIP por sobrefacturación, evasión fiscal y fuga de capitales, figuras legales que hasta el momento no habían aparecido y eso que la firma se declaró en "estrés financiero" en diciembre del año pasado.

También es cierto que la propuesta de la firma a sus acreedores comerciales fue emitida recién la semana pasada y de manera informal, hecho que disgustó a los acreedores comerciales, a los que le debe u$s 350 millones. La propuesta, que los integrantes de Sumando Cabezas calificaron de insuficiente, incluía un pago del 20% de la deuda hasta u$s 30.000, la dolarización del monto restante y un plan de apgos con 8 años de plazo, que se reduce a 6 si los productores y corredores le siguen proveyendo de materias primas.

Los más de 150 acreedores (la idea es alcanzar unos 800 afectados por la cesación de pagos del holding) que forman parte de este grupo no aceptan estas condiciones ya que, dicen, la firma presentó esto de manera informal, no proporcionó garantías sobre cómo hará para conseguir negocios con los que puedan solventar la deuda y señalaron que lo que pide Vicentin es como si un banco ponga un corralito y "te pida que hagas depósitos para que te puedan devolver tu dinero", según dijeron al sitio news.agrofy.com.ar.

Un grupo de colegas de Vicentin, Molinos, AGD, Bunge y Dreyfus, lwe ofrecieron a la firma unas 100 toneladas de girasol para molienda en el complejo industrial que tiene en el límite entre San Lorenzo y Ricardone.

Pero es más difícil conseguir un comprador por el precio que el grupo desea, ya que el apuro en que se encuentra tira su valor para abajo y, por otro lado, muchos grupos nacionales no creen tener créditos en dólares para poder comprar activos de Vicentin.

¿Se llegará al extremo de estatizar Vicentin? Todavía no hay certezas ni por sí, o por no. Lo cierto es que las demandas del Nación suenan más urgentes que para cualquier otra empresa que presente problemas de pago de sus deudas.