La salida del país de la reconocida marca de indumentaria profundizó una crisis que se repite en múltiples sectores. Se estima que, en los últimos cuatro años, más de 30 multinacionales tomaron medidas similares.
El grupo español Inditex, dueño de la marca de indumentaria Zara, se suma a la lista de empresas que en los últimos años decidieron dejar de invertir en el país. Cabe señalar que, a diferencia de lo ocurrido con Falabella, la multinacional Regency Group, gestionará las operaciones de la marca en Argentina y Uruguay, mantendrá a toda la plantilla de empleados distribuidos en las 11 tiendas que tiene actualmente.
Las limitaciones cambiarias, la falta de créditos, la crisis económica en medio de una disminución en los dígitos anuales, y la falta de anticipación política, jurídica y social, explicarían la decisión de la organización.
En ese sentido, se estima que, en los últimos cuatro años, más de 30 multinacionales abandonaron o redujeron fuerte sus negocios en el país. El caso más extremo fue la chilena Falabella, que cerró su operación en la Argentina definitivamente a mediados de 2021, luego de su fracaso en encontrar un socio local, primero, y un comprador para sus activos en el país, después.
Por qué Walmart le vendió a De Narváez
Otra rutilante salida fue la de Walmart. Por enero de este 2020, desde la compañía no hablaban de venta. Se decía que estaba buscando un socio local para seguir adelante con sus 92 locales (Walmart, Changomás y Mi Changomás), un mayorista, Punto Mayorista, un centro de distribución en Moreno y tres centros de producción para panificados, carnes y embutidos. Sin embargo, a poco de empezar la cuarentena, la cadena de retail comenzó a hablar de venta en Argentina, producto de la crisis, la inestabilidad y la falta de seguridad jurídica.
Finalmente, en noviembre de ese año, el Grupo De Narváez se quedó con el negocio. “Los nuevos propietarios, que cuentan con operaciones minoristas en Argentina, Ecuador y Uruguay, aportarán una sólida experiencia local que impulsará el crecimiento de la empresa. Walmart seguirá apoyando a la empresa a través de servicios de transición y acuerdos de abastecimiento; no obstante, Walmart no retendrá una participación accionaria”, informaba la firma. Para finales del 2021, la marca como tal dejaba de existir.
También en 2021, el banco de origen brasilero, Bradesco dejaba el país, luego de haberse instalado en el año 2000. Tenían como clientes a sectores corporativos y empresas multinacionales.
Más sectores advierten que se intensifica el cepo a las importaciones
El año pasado, el grupo brasileño Itaú confirmaba que había iniciado negociaciones con el Banco Macro, perteneciente a la familia Brito, para vender su operación minorista en Argentina. En tanto, Petrobras liquidaba la totalidad de su inversión en el país en octubre. La medida formaba parte de un plan de desinversión que había arrancó en 2010 y que también abarcaba sus operaciones en Colombia y Uruguay.
Asimismo, en el sector energético, el grupo italiano ENEL anunciaba la venta del control de Edesur, la distribuidora eléctrica del AMBA. Previo a eso, ya había transferido su negocio de generación eléctrica a Central Puerto y a YPF Luz.
En junio del 2022, la compañía Nike cedió su negocio en la Argentina a la empresa panameña Regency Group, dueña de Northbay International, que ya opera como distribuidor de la marca en otros países de América Latina. Desde la empresa de indumentaria deportiva explicaron que se realizó la transición del negocio de la marca en Chile, Argentina y Uruguay a una asociación estratégica de distribuidores, como ya se había hecho en otros mercados de la región. “Al igual que con las otras asociaciones de distribución de Nike en América Latina, y en todo el mundo, estos nuevos socios están comprometidos a servir a los consumidores locales y creemos que ayudarán a impulsar el crecimiento sostenible en estos países”, detallaron.
Una empresa alemana se va de la Argentina y vende su filial por un dólar
Otras empresas que se fueron
La británica Rurelec vendió sus operaciones luego de varias décadas en la Argentina. En mayo, se desprendió de su parte en la generadora Central Térmica Patagonia, propiedad de Energía del Sur, en Comodoro Rivadavia, Chubut. El holding Interenergy, liderado por el argentino Rolando González Bunster la compró por 5 millones de dólares.
En marzo de este año, la reconocida empresa alemana de artículos de librería Edding vendía su filial argentina. De acuerdo con lo trascendido, la decisión de vender se debió a un cambio en su estrategia global. "Con la implementación de la Estrategia 2025+, el Grupo Edding dejó de tener una estrategia dedicada a la región de América Latina a principios de 2021", explicaron. "Desde entonces, los riesgos de nuestras actividades en Argentina ya no estaban en equilibrio con los beneficios esperados y ahora pueden reducirse significativamente mediante esta venta", sostuvieron.
Otras empresas que se sumaron a la salida (con cierre o venta de activos) del país fueron las autopartistas Axalta y PPG; la app de delivery, Glovo (vendió sus operaciones de América latina a Delivery Hero, dueña de Pedidos Ya); y las farmacéuticas Hepatalgina, Pierre Fabre, Gerresheimer y Eli Lilly.
En el mercado aeronáutico, sin dudas la que mayor impacto causó fue Latam, cuando en junio de 2020 cesó sus operaciones de cabotaje en medio de las restricciones estrictas por la pandemia.
RM