Por Claudio Celano Gómez / Un decálogo con las mejores prácticas para captar y retener el talento, en especial en las PyMEs. Cómo gestionar este activo.
El talento es tan difícil de definir como de retener. Lo que para una empresa puede ser un empleado talentoso, para otra puede no serlo. Además, en un contexto en el que conseguir trabajo de calidad no es nada sencillo, las empresas deben tener políticas de recursos humanos que marquen una diferencia respecto de otras compañías.
Esta realidad es todavía más complicada para las pequeñas y medianas empresas, las que muchas veces no pueden competir con los beneficios y compensaciones que ofrecen las grandes firmas. Sin embargo, para Gabriel Pereyra, CEO de Modobeta, dedicado a desarrollar prácticas y compartir herramientas para la transformación cultural y las áreas de gestión de talento, “el contexto actual determina que el éxito de una compañía está muy atado a la creatividad y la capacidad de gestión del equipo que la compone”.
Los empleados con talento de las PyMEs, que son aquellos que marcan la diferencia en una compañía, quieren cada vez más. O, muchas veces, quieren otra cosa. ¡Quiero más días de Home Office!, ¡Acá siempre hicimos las cosas así!, ¿Para qué probar algo nuevo?, ¡No me siento reconocido!, ¡Renuncio, me voy de viaje por varios meses! ¡Cada vez más me cuesta encontrar el talento que preciso!… Estos son algunos de los comentarios más comunes a los que se enfrentan los dueños de las pequeñas o medianas empresa. En estos tiempos tan dinámicos, la gestión de talento se complejiza cada vez más. Diferentes generaciones conviviendo, la necesidad de dar respuestas más agiles al mercado, la escases de talento especializado son algunos de los desafíos que se deben enfrentar cotidianamente.
Sin embargo,
ante tanta complejidad, Pereyra es optimista y comparte 10 claves para gestionar
el talento y no fracasar en el intento.
-La gestión del talento no es simple, por eso es importante que se le dedique tiempo y se le dé prioridad en la agenda.
-Hay que hablar con el equipo de trabajo, escuchar a la gente, aclarar inquietudes y descubrir nuevas capacidades. Tener reuniones grupales e individuales es la mejor forma de apagar el radio pasillo.
-Comunicar lo más claro posible cuál fue el sueño por el que creó la empresa, dejarlo correr por los pasillos y buscar contagiar a todos los colaboradores para alcanzarlo.
-La mejor forma de enfrentar la complejidad es armando equipos diversos, no son fáciles de gestionar, pero le son los más efectivos.
-Hoy conviven en el mercado laboral cinco generaciones diferentes de colaboradores. Seguro cuesta comprender las diferentes generacionales, hay que aceptarlo y buscar dialogar lo máximo posible para entenderlos. Hay que tener en cuenta que muchas cosas han cambiado y es muy útil estar abierto a nuevas formas de ver el mundo.
-Hay que confiar en el talento. Hoy hay más de 800.000 personas con más 45 años con dificultades para insertarse en el mercado laboral
-Es importante tomarse el tiempo para reconocer los logros individuales y colectivos de la empresa y festejarlos con el equipo.
-Si algo sale mal, vale recordar que el feedback de corrección se da en forma individual y en privado.
-Apoyarse en la tecnología es fundamental. Hoy hay muchas herramientas que son económicas y ayudan a gestionar el talento permitiendo dedicar más tiempo de calidad con los colaboradores.
-Siempre es bueno contar con asesoramiento de expertos que puedan brindar herramientas útiles para gestionar el talento.