El nomadismo digital y las necesidades de fidelizar al talento impulsó la creación de Maslow, el nuevo emprendimiento del creador de Taringa!, que ya cuenta con más de 20.000 usuarios y llegada a 25 países.
El 92% de los Millennials -nacidos entre principios de los 80 y fines de los 90- y el 90% de los Centennials -fines de los 90 a principios de la década de 2010- están pensando en cambiar de trabajo, según una encuesta realizada por LinkedIn. Se trata del 75% de la fuerza de trabajo actual, y por este motivo, las empresas en cualquier parte del mundo, de cualquier tamaño e industria se enfrenta a un desafío sin precedentes en fidelización del talento.
Matías Botbol, creador de Taringa!, uno de los sitios de más tráfico por internet a nivel mundial y que llegó a tener un promedio de 75 millones de usuarios mensuales, experimentó esta problemática en carne propia. Encontró en Diego Boryszanski, -creador de Fuljaus en 2018, galardonada como la mejor startup de e-commerce- y en Ricardo Migoya -que viene de liderar durante 20 años Voyer International, empresa de búsquedas ejecutivas- los socios ideales para crear Maslow, una empresa global de tecnología que cuenta con una plataforma propia que le permite a las grandes empresas administrar su política de recompensas y dar beneficios personalizados y en cualquier parte del mundo.
“Pensamos que las empresas que más iban a necesitar nuestro servicio son las de tecnología, que son las que más requieren desarrollar propuestas atractivas e innovadoras para el talento, pero nos encontramos que es una problemática que atraviesa a todas las industrias”, explica Boryszanski.
Mitos y verdades de los nómadas digitales
La compañía, que fue invertida por Newtopia VC, Bdev Ventures e inversores ángeles por 920 mil dólares- actualmente tiene más de 80 clientes, entre ellos Havas, LDC, L'Oreal, N5, Nowports y Manpower y llega a 25 países como México, Bolivia, Chile, Colombia, Brasil, Argentina, Estados Unidos, España, Portugal, Alemania, entre otros. Por su parte, la plataforma es utilizada por más de 20.000 usuarios y cuenta con más de 5.000 beneficios en toda Latinoamérica.
“Producimos un triple impacto: en las empresas, ya que les damos el servicio de gestión integral de los beneficios; en los partners y proveedores que encuentran en Maslow un canal de ventas de sus productos y servicios y, por último, el empleado, el usuario final, que puede decidir, qué beneficio usar, de la manera y en los plazos que más le gusten”, amplía Botbol.
El nomadismo digital es otro factor que empuja la necesidad de que las áreas de recursos humanos deban reinventarse y encarar la fidelización con un nuevo enfoque: “Nuestros beneficios no tienen fronteras geográficas, en tiempos donde crece la tendencia de las empresas que son full-remote o bien que se han volcado en gran medida al teletrabajo, necesitan tener propuestas de recompensas lo suficientemente flexibles como para adaptarse a estos nuevos paradigmas”, explica Migoya, quien además lidera el desembarco de la empresa en México.
“Creemos que cada persona merece los beneficios que realmente le importan y acceder a ellos de la manera más eficiente posible. La clave es motivar a las personas con lo que necesitan en el momento en el que lo necesitan, como teoriza el psicólogo Abraham Maslow, en su pirámide de las necesidades”, concluyen los emprendedores.
