El reskilling es un aspecto realmente valorado en los trabajadores que tienen intención de cambiar de empleo, según un informe privado.
El desarrollo de habilidades es uno de los aspectos mejor valorado por parte de los trabajadores. De hecho, un informe de Randstad reveló que para 4 de cada 5 trabajadores argentinos el reskilling es un factor importante en su empleo.
Dentro de ese 79% se destaca un mayoritario 59% de los consultados que considera que es muy importante que su empleador le brinde la posibilidad de aprender nuevas habilidades, y un 20% que indica que es un factor importante. Asimismo, el 83% de los trabajadores que tienen intención de cambiar de empleo, consideran este aspecto como especialmente relevante.
Los resultados muestran que cobra más relevancia entre los perfiles profesionales en el 80% de los casos, mientras que entre perfiles operativos y los perfiles digitales tiene una valoración levemente menor (74% en ambos casos).
Sobre estos resultados, Andrea Avila, CEO de Randstad para Argentina, Chile y Uruguay, afirmó: “En un mercado laboral en transformación constante, donde los ciclos son más cortos y los conocimientos y habilidades pierden vigencia cada vez más rápido, las personas valoran especialmente a aquellas empresas que les brindan oportunidades de aprendizaje y desarrollo. La inversión en formación y desarrollo ayuda a las organizaciones a cerrar la brecha de habilidades y la escasez de talento, al tiempo que impacta en el compromiso de sus colaboradores”.
Upskilling vs reskilling: ¿Qué recomiendan los especialistas acerca de las habilidades?
Intención de cambio, retención de talento y reskilling
Si bien la intención de cambio entre los trabajadores subió en el último semestre 3 puntos porcentuales, alcanzando el 34% vs el 31% del semestre anterior, los cambios de trabajo efectivamente concretados aumentaron solo 1 punto porcentual (12% vs 11%).
En este sentido, al analizar el comportamiento ante el cambio durante los últimos años, los resultados muestran que este comportamiento ha sido bastante estable. El contexto de incertidumbre, la inflación y otros componentes de la macroeconomía local explican en parte la actitud conservadora de los trabajadores donde, si bien hay más trabajadores que consideran la posibilidad de cambiar de empleo, muchos todavía no se animan a dar el paso, especialmente en un contexto donde la actividad económica y la demanda laboral no muestran señales de crecimiento sostenido.
Esta relativa estabilidad es una oportunidad para que las empresas refuercen las estrategias de fidelización y engagement de sus colaboradores para evitar que una mayor intención de cambio impacte en un aumento en la rotación.
RM