Los lugares de trabajo deben proteger a sus recursos humanos, trabajar en la prevención, y crear las condiciones para que todos puedan convivir en espacios seguros de respeto y empatía.
Abordar el tema del antisemitismo en el ámbito laboral reviste, o debería revestir, una importancia crucial para las áreas de Recursos Humanos de las empresas, interesadas y preocupadas por fomentar ambientes respetuosos, empáticos y libres de discriminación.
En el auspicioso camino que se está recorriendo en los ámbitos corporativos para trabajar los temas de inclusión y diversidad, el antisemitismo no puede quedar afuera, y debe ser tenido en cuenta y afrontado, a la luz de los atroces acontecimientos de los que hemos sido testigos.
Este domingo se cumplen 9 meses de los ataques terroristas de Hamas perpetrados en el sur de Israel. Se trató de la peor masacre ejecutada, tras el Holocausto. Un escenario impensado, solo por quienes infunden el terror y desprecian el valor de la vida.
El 7 de octubre se corrió un velo, e hizo emerger, de manera preocupante, un aspecto en el que hay que trabajar fuertemente: el antisemitismo y su cara moderna: el antisionismo.
Bienestar laboral y salud mental, factores predominantes al momento de buscar empleo
Para abordar el concepto de antisemitismo, es importante remitirse a la definición que, en el año 2016, adoptó la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA, por sus siglas en inglés).
“El antisemitismo es una cierta percepción de los judíos que puede expresarse como el odio a los judíos. Las manifestaciones físicas y retóricas del antisemitismo se dirigen a las personas judías o no judías y/o a sus bienes, a las instituciones de las comunidades judías y a sus lugares de culto.”
La definición de la IHRA está acompañada por ejemplos contemporáneos de antisemitismo, como la negación del Holocausto, o negar al pueblo judío su derecho a la autodeterminación, o formular acusaciones falsas, deshumanizadas y estereotipadas sobre las personas de origen judío.
Se sabe que los ambientes laborales pueden ser caja de resonancia de prejuicios, y desinformación, elementos que, amalgamados con la intolerancia y el odio, pueden ser el germen de agresiones y actos futuros que atentan contra la sana convivencia.
El antisemitismo conecta directamente con la ignorancia, vulnera derechos, y atenta contra espacios de concordia. El antisemitismo en el ámbito laboral no solo perjudica a las personas directamente afectadas, sino que también puede generar repercusiones negativas y nocivas en el conjunto de la organización.
Atracción y retención: cuál es la situación del talento dentro de las empresas
Los lugares de trabajo deben proteger a sus recursos humanos, trabajar en la prevención, y crear las condiciones para que todos puedan convivir en espacios seguros de respeto y empatía.
Cada organización tendrá el desafío de encontrar la forma de abordar y trabajar la temática, y de ofrecer y diseñar los programas y las iniciativas que mejor se adapten a su dinámica y su naturaleza. Sin dudas, la complejidad del mundo en el que vivimos insta a no ser indiferentes, a no mirar para otro lado, a no evadir temas complejos, y a no creer que éste no constituye un tema propio.
La inclusión, la empatía y el respeto son valores que deben alzarse y defenderse para todos. Deben guiar nuestras acciones y decisiones para construir un entorno laboral sano y armónico.
En este sentido, el abordaje del antisemitismo, sobre la base de la información, sobre la base de los hechos históricos, sobre la base de la promoción de los derechos humanos, resulta hoy una prioridad absoluta.
*Especialista en Recursos Humanos. Directora de la consultora Tikshoret
